Charlotte Adelman era solo una niña cuando su familia y su vida entera se vieron bruscamente interrumpidas por los estragos del Holocausto. La familia Aldeman vivía en París en 1940 y cuando llegaron los nazis sus padres se vieron obligados a entregarla a ella y a su hermano en un orfanato. Mientras tanto, los padres de Charlotte fueron obligados a dirigirse a un campo.
“Cuando me quitaron a mi madre fue como si me dejaran sin brazos ni piernas”.
En medio del terrible miedo por dirigirse a un campo de concentración el padre de Charlotte se las ingenió para escapar, pero la madre tenía mucho miedo y decidió no arriesgarse. Mientras tanto Charlotte fue separada de su hermano al cual tuvieron que llevar a un hospital por una fiebre.
Charlotte solo tenía 9 años cuando Francia fue invadida por los nazis.
Por suerte, una amiga de la familia Adelman logró ponerse en contacto y rescató a Charlotte del orfanato. Cuidó a la pequeña un tiempo hasta que su padre logró dar con ella y decidió llevarla con la familia Quatreville en Beaumont du Argonne.
Los niños que se habían quedado en el orfanato fueron asesinados poco después.
El padre de Charlotte estaba trabajando arduamente para lograr reunir a su familia y decidió pedir ayuda al señor Quatreville ya que sabía que allí ella estaría a salvo. Fue entonces cuando Charlotte comenzó a vivir en el sótano de la familia Quatreville. Lo único que tenía era un colchón y una lámpara y allí le daban comida sin falta. Ginette, una de las hijas de la familia Quatreville también bajaba una vez al día para ayudar a Charlotte a recibir un baño.
“Me trataron como a su propia hija”.
Cuando la guerra terminó, la familia Quatreville cuidó a Charlotte durante 6 meses más mientras su padre buscaba frenéticamente a su hermano por todos lados. Lamentablemente, con el tiempo Charlotte perdió contacto con la familia que le salvó la vida. No podía imaginar que más de 70 años después lograría reunirse con ellos.
Charlotte vive actualmente en la ciudad de Phoenix en Estados Unidos.
Alain Quartreville recuerda con toda claridad cuando recibieron en su casa a Charlotte. También recuerda lo mucho que su madre se preocupaba cuando no recibían noticias de ella, y tras la muerte de los señores Quatreville decidió utilizar las redes para encontrar a su vieja amiga.
Alain tan solo contaba con cuatro años de edad cuando Charlotte se mudó a su sótano.
En el 2014 Alain le escribió a Charlotte a través de Facebook y lograron reencontrarse para recordar aquellos años tan difíciles. Alain y Ginette se reunieron con Charlotte y buscaron el nombre de la madre de Charlotte en el Memorial de la Shoah, donde aparece el nombre 76.000 judíos deportados desde Francia.
“Fue muy emotivo”.
También se tomaron un momento para recordar a la madre de Alain. Para él este hubiese sido un reencuentro que hubiese hecho muy feliz a su madre quien siempre trató con mucho cariño a Charlotte.
“Ella arriesgó mi vida para salvarme. ¿Cómo puedes agradecerle eso a alguien?”.