Es cierto que muchas personas no creen en los milagros, si embargo, la vida de Hailie Dillon es un verdadero es una prueba fiel de que sí existen. Ella nació en la semana 23 de gestación y su piel era tan delgada que a través de ella se podían ver sus venas e incluso su cerebro.
Cheri Pirce, de 22 años y madre de Hailie narró que su hija luchó por su vida apenas siendo una recién nacida.
El trabajo de parto comenzó a tan sólo días de la fecha límite para que el feto no fuese considerado un “aborto tardío”. Los médicos dijeron que el nacimiento no era viable, y que el hospital de la Isla de Wight no estaba preparado para recibir y atender a un bebé tan prematuro.
Aunque tenía contracciones decidió viajar a Darlington, Teesside con su novio Timothy Dillon, de 32 años. Fue un largo viaje de casi 500 kilómetros y 8 horas en ferry para llegar al Hospital James Cook, en Middlesbrough para dar a luz a su bebé cerca de su familia.
Esta princesa nació el 23 de febrero del año pasado y con un peso de 0,5 kilos. Fue necesario revivirla porque uno de sus pequeños pulmones colapsó y permaneció siete minutos sin respirar.
Ella aún estaba en la etapa de feto y no parecía un bebé, sé que está mal decirlo, pero ella parecía un alienígena por lo roja que estaba su piel. No podíamos creer que sobreviviría».
Desde su nacimiento la colocaron en una incubadora y no pudieron tocarla, 18 días después pudieron acunarla por primera vez.
Podíamos ver todas las venas de su cerebro a través de su piel roja».
Cheri pensó que de haberse quedado en la isla su bebé no hubiera sobrevivido. La vida de Hailie es un milagro y felizmente celebró su primer cumpleaños el mes pasado después de tener un año difícil.
Estoy tan orgullosa de mi hija, todo lo que hemos pasado, todo lo que ella ha pasado ha sido horrible”.
Hailie fue diagnosticada con Retinopatía del prematuro en etapa 3 y podía quedar ciega de por vida ya que su retina no había logrado desarrollarse.
Sin embargo, sus padres no se conformaron y fue trasladada en avión al hospital Princess Anne en Southampton y luego visitó el hospital Portsmouth Queen Alexandria y finalmente lograron salvarle la vista.
Fue dada de alta el 19 de junio del año pasado, dos días después de la que sería su fecha de nacimiento real.
Cheri es madre a tiempo completo, tiene otra hija, Liam Price, de 7 años, que tiene TDAH, y cuida a dos hermanos de Hailie por parte del padre y afirma que no tiene planes de tener más hijos.
Según el NHS, no se considera un “aborto tardío” los embarazos que superan las 24 semanas y solo tienen alrededor del 35 por ciento de probabilidades de sobrevivir.
Esta pequeña princesa es una guerrera que desafió todo pronóstico y se aferró a la vida, superando una difícil etapa junto al amor de sus padres. Comparte la historia de Hailie que hoy ya tiene un año de vida.