Cuando paseamos por vías al aire libre siempre es necesario tomar todas las precauciones, por si pasan vehículos o ciclistas imprudentes, ya que en cuestión de segundos pueden suceder los accidentes más desafortunados.
Lamentablemente, quienes van en bicicleta muchas veces se creen dueños y señores, sin tener la más mínima consideración por los peatones que se crucen en su camino. Puede ocurrir que la falta de señalización, lleve a un vacío legal de no saber quién tiene preferencia. Y aunque se esperaría un mínimo de sentido común de los ciudadanos, respetando al peatón, y peor aún cuando son niños o ancianos, siempre hay casos que superan todos los límites y causan conmoción.
Es lo que sucedió con un sujeto en Bélgica, a quien no le importó la presencia de una pequeña niña en medio camino.
En lugar de aminorar la marcha, simplemente advirtió con su bocina y sus gritos, de que se apartara, pero a la pequeña ni a la madre les dio tiempo a reaccionar. El hombre, al no encontrar respuesta, siguió acelerando, y la terminó arrollando, sin siquiera detenerse para disculparse o averiguar si estaba herida.
Neïa cayó de bruces en el camino nevado por culpa del ciclista insensible
Las imágenes fueron recogidas por el padre de la pequeña, Patrick Mpasa, quien grababa a su esposa e hija en un día de paseo en la zona de Baraque Michel, en torno a Navidad.
El incidente rápidamente causó una ola de indignación, especialmente porque en el video parece que el sujeto, además de no detenerse, abre su rodilla deliberadamente para empujar a la inocente niña, que tuvo que ser llevada al médico tras la caída.
Patrick, además de viralizarlo en las redes para dar con el paradero del hombre, denunció los hechos a la Policía. Acto seguido, el ciclista se convirtió en blanco de críticas masivas en las redes, por lo que se comunicó con los padres, suplicando que retiraran la denuncia en vista del acoso que estaba sufriendo.
«Solo me llamó en privado y sin identificarse para que retire la denuncia. No estaba arrepentido, ni preguntó cómo estaba mi hija», declaró el padre.
El padre, por supuesto, que no retiró la denuncia, esperaba que de verdad se hiciera justicia, ya que al hombre le podría esperar un año de prisión. Pero jamás imaginó que el Tribunal belga actuaría así.
Tres meses después de lo sucedido, finalmente el juez ha determinado que el hombre tendrá que indemnizar a los padres por la ridícula cantidad de 1 euro. ¿El motivo? Que el ciclista nunca tuvo intención de herir a la pequeña, y que con todo el acoso que sufrió en redes sociales ya fue suficiente «compensación».
En el juicio, el hombre se justificó diciendo que abrió la rodilla para no caerse, y evitar un desastre mayor. Y le creyeron.
Este es el video completo del incidente que causa tanta indignación:
Resulta que ahora el escrache público en las redes puede actuar en favor de los culpables. ¡Es insólito! Déjanos saber qué opinas de la sentencia que ha recibido este sujeto. ¿Le crees? ¡Comparte tu opinión con tus amigos!