Algunas de las cuevas que realizan los osos para hibernar son abandonadas por las madres, dejando dentro de ellas a sus crías. Por esta razón, en Rusia hay equipos de rescate que realizan operativos para llegar a estas cuevas y poder ayudar a estos pequeños osos. Se desconoce cuáles son las razones del abandono de la madre, pero los equipos de rescate saben que es muy importante localizar a estos osos a tiempo, ya que su vidas corren peligro y podrían morir de frío.
¡Son tan pequeños que su peso alcanza apenas unos pocos kilos!
Es el caso de estos 5 osos que han sido rescatados para poder garantizar su crecimiento y desarrollo para que posteriormente puedan tener una vida en su hábitat natural.
Los rescatistas se van orientando por el ruido que hacen estos osos, es un lloriqueo y un llanto que indican que se sienten solos, con hambre y asustados. Este es un trabajo conjunto que hacen los equipos de rescate con el Fondo Internacional para el Bienestar Animal (IFAW) en la región de Tver Bosque de Rusia.
Shawana Moos, quien es directora de comunicaciones de IFAW, comentó que desde el año 1997, han rescatado a más de 200 osos en esta región. Estas acciones de rescate de IFAW estuvieron presididas por un proyecto que fue dirigido por Valentín y Svetlana Pazhetnov. Valentín se dedicaba a la caza en Rusia hasta que un día se le presentó una revelación sobre los animales que cazaba y dejó por completo esta práctica para ayudar a rescatar a los animales.
Gail A’Brunzo, gerente de rescate de vida silvestre en el IFAW, comentó que Valentín estaba realizando un excelente trabajo. A pesar de ser un buen trabajo no pudo ser sustentable en el tiempo por la falta tanto de recursos económicos propios como por parte del Gobierno. No contaba con los fondos para apoyar los esfuerzos requeridos para una buena labor y fue entonces cuando crearon el IFAW.
Mike, es un oso cachorro, el más grande y el único varón de cinco osos que fueron rescatados. Nació en Tver el mes de diciembre.
Es muy fácil reconocer a Mike entre sus compañeros por su tamaño y su gran cuello blanco.
Cleopa fue quien llego después, proveniente de la región Kirov. Su peso estaba cerca de las 3 libras, su salud estaba un poco comprometida al llegar pero gracias a todas las atenciones, su recuperación fue rápida.
Zoya y Zosya se presume que son compañeras de camada de la región de Pskov. Cuando fueron rescatadas tenían aproximadamente 40 días de edad y su peso oscilaba entre dos y tres kilos. Masha fue la última que llegó al refugio. Proviene de la región de Karelia y tenía entre 40 y 45 días de edad.
Gail comentó que al principio todos estos cachorros recatados eran alimentados con biberón de seis a ocho veces al día, pero poco a poco esta frecuencia fue disminuyendo gradualmente con el tiempo. El peso de estos cinco pequeños osos fue triplicado. En el refugio los están rehabilitando para que puedan ser liberados y tener una vida normal.
Se estima que en pocos meses ya estarán lo suficientemente grandes y rehabilitados para ser llevados a un recinto exterior con un grupo de compañeros osos. El objetivo es que aprendan a buscar comida y subir a los árboles. Su comportamiento debe ser como osos salvajes para poder sobrevivir en su hábitat natural.
Son pequeños y necesitan compañía, aunque cuando ya sean más grandes y estén solos, sus compañeros osos los acompañarán. No es bueno que se acostumbren a los seres humanos. La organización IFAW se ha preocupado y esforzado por compartir las experiencias y sus conocimientos sobre estas labores alrededor del mundo con la intención de ayudar en el rescate, recuperación y reinserción de estos animales en su ambiente natural.
Si quieres y puedes colaborar con la maravillosa labor que hace esta institución, puedes hacer clic aquí.
¡Comparte esta linda historia! Estas imágenes hacen que nuestro día se llene de ternura y agradecimiento a gente especial y con gran corazón que dedican su vida a salvar a animales que lo necesitan.