La migración en el mundo se ha convertido en una gran realidad que crece cada día porque en muchos países afectados por severas crisis, las personas se ven obligadas a tomar otro rumbo para mejorar su calidad de vida.
No es fácil comenzar desde cero y llevar una vida entera a veces en dos maletas, a veces en una mochila, para incorporarse en otro lugar, aprender otro idioma, otra cultura y trabajar duro para sobrevivir.
En Nigeria una joven enfermera compartió en sus redes sociales un logro significativo del cual está sumamente orgullosa. Le dolió mucho irse de su país para tener un mejor futuro, pero ahora celebra el fruto de su esfuerzo.
Compró su propia casa a sus 22 años
Ona Onyia es una joven nigeriana llena de sueños e ilusiones, desde siempre supo que para lograr lo que quería debía prepararse y convertirse en una profesional para asumir retos y poder salir adelante.
Y, como le gustaba ayudar a las personas, decidió estudiar la carrera de enfermería, misma en la que se graduó.
Su madre la acompañó y compartió con orgullo que finalmente había alcanzado una de sus metas y empezaría una carrera profesional al servicio de sus pacientes.
Lamentablemente, de acuerdo a los indicadores elaborados por las Naciones Unidas para medir el progreso de un país, y que reflejan el nivel de vida de sus habitantes, Nigeria se encuentra entre los que tienen la peor calidad de vida del mundo.
Esa fue la razón fundamental por la cual Ona decidió que era el momento en que debía emigrar y se fue a los Estados Unidos.
Debía comenzar de cero en un nuevo lugar
A pesar de que al principio no fue nada fácil, puso todo su empeño y asumió el reto que representa comenzar desde cero en un lugar desconocido y dejando atrás los amores y afectos que han formado parte de su vida durante tanto tiempo.
Es el precio que debe pagarse para abrirse a posibilidades de mejora que no podrían ser encontradas en el lugar de origen.
Por fortuna el caso de la joven enfermera es uno de los tantos que puede tomarse como ejemplo de que cuando se quiere se puede, a sus 22 años se compró su primera casa en Houston, Texas.
Ella está muy feliz porque sabe que con su esfuerzo y empeño pudo lograrlo, a pesar de un sin fin de dificultades que tuvo que ir enfrentando en la marcha.
Está muy orgullosa de lo que ha conseguido
“No puedo creer a los 24, soy oficialmente propietaria de una casa. ¡Finalmente hice mi primera compra de niña grande! Sin cofirmantes, lo hice yo sola.
Ahora soy propietaria de una casa. Dios tenía todo en sus manos”, dijo Ona, desbordando en gratitud y alegría.
Compartió con los usuarios de sus redes sociales las hermosas fotos donde posaba en su recién comprada casa y todos expresaban la satisfacción de su logro, valoraron su esfuerzo y la forma como pudo poner en práctica su deseo de superación.
“Eres un ejemplo a seguir de muchos jóvenes como tú, no te detengas, si sigues así seguirás recibiendo muchas más bendiciones para tu vida”, le escribió una alentadora y emotiva internauta.
Ona sabe que apenas está comenzando y sigue firme, pero un paso a la vez. Ahora mismo está interesada en decorar su nuevo hogar para sentirse totalmente a gusto, como ella deseó siempre.
Sin duda se ha convertido en un ejemplo para muchos inmigrantes que, como ella, aspiran lograr sus sueños.
Es más difícil cuando se emigra a otro país por necesidad, pero sí es posible salir adelante, sí es posible lograr los sueños con trabajo duro, esfuerzo y humildad.