Desde el pasado 27 de abril se emprendió un operativo de búsqueda para dar con el paradero de Anna y Olivia, de 1 y 6 años, que desaparecieron junto a su padre Tomás Gimeno, de 35 años, en Tenerife.
Horas después de la desaparición y de que Tomás Gimeno amenazara a la madre de las menores, su exesposa, diciéndole que no volvería a ver a sus hijas, apareció la embarcación en la que él salió la noche del 27 con dos bolsos.
El barco estaba a la deriva, y vacío, las autoridades centran ahora la búsqueda en el mar, la tripulación del buque oceanográfico Ángeles Alvariño y la Guardia Civil, determinaron el área en la que harían el rastreo. El geoposicionamiento del teléfono móvil de Tomás Gimeno es clave en la investigación del caso.
Aunque inicialmente detendrían la búsqueda con la embarcación y el submarino, decidieron continuar al menos hasta el próximo 14 de junio por si pudieran localizar otra pista sobre el paradero de las menores.
Rastreando en el fondo del mar, con una capacidad de buscar a miles de metros de profundidad, hallaron una bombona de oxígeno y una manta.
Este lunes se confirmó que los objetos pertenecen al padre de las niñas, hasta este momento se conoce que se trata de una funda nórdica y un tanque de oxígeno usado para buceo.
Los objetos serán trasladados al Servicio de Criminalística de la Guardia Civil en Madrid para ser sometidos a los análisis pertinentes.
María Gámez, directora de la Guardia Civil, confirmó que hallaron una funda nórdica, y un tanque de buceo. Asimismo, dijo que era un rastreo complejo por la amplitud de la zona, resaltó que los objetos se encontraron aproximadamente a mil metros de profundidad.
El sonar y el robot del buque trabajan desde hace más de una semana en la zona en la que apareció a la deriva la lancha de Tomás Gimeno, a una milla náutica del Puertito de Güímar.
Durante el rastreo, se radiografía el fondo del mar para identificar algún objeto y subirlo a la superficie con el robot.
En la investigación también trabajan efectivos de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil (UCO), cada día más de 70 personas participan en las labores de búsqueda.
El caso está bajo secreto de sumario, los agentes han revisado en varias oportunidades la finca de Tomás Gimeno ubicada en Igueste de Candelaria, con el apoyo de la unidad canina de la policía Nacional que trasladaron desde Madrid.
Tomás Gimeno fue visto por última vez cuando llegó en su coche al puerto desde el que salió en su embarcación, el vigilante del lugar confirmó su visita, y, además, las cámaras de seguridad lo captaron con maletas y bolsas que bajó de su auto.
Se espera que en las próximas horas puedan tener más pistas sobre el paradero de las pequeñas, comparte este avance.