Todos los bebés merecen crecer en un hogar rodeados de amor y bajo la protección de una familia que pueda cubrir sus necesidades garantizando su salud y bienestar.
Lamentablemente este no siempre es el caso y hay muchas madres que deben tomar la difícil decisión de dejar a los pequeños en algún lugar con la esperanza de que puedan tener una mejor vida.
Los lugares más frecuentes donde dejan a los bebés abandonados son hospitales, iglesias y estaciones de bomberos.
Tan sólo horas después de haber nacido los bebés necesitan con urgencia de alguien que los cuide y vele por ellos.
En estas situaciones el tiempo es vital y hay muchos casos en los que nadie encuentra al bebé y sucede lo peor. Es por eso que Monica Kelsey ideó una manera de mantener a estos pequeños a salvo.
“Queremos que tengan la opción de ir a un hogar seguro”.
Ella misma fue abandonada por su madre biológica así que ha crecido muy consciente de toda la ayuda que algunas mujeres pueden necesitar para enfrentar estos momentos tan duros.
Lo más importante es que el bebé se mantenga sano y salvo así que creó lo que hoy se conoce como «Safe Haven Baby Boxes».
En total hay 24 de estas cajas instaladas en los Estados Unidos.
Se trata de una especie de caja que funciona como una cuna y que se encuentra en lugares estratégicos como estaciones de bomberos.
Allí, las mujeres tienen la posibilidad de dejar a un bebé de manera completamente anónima y se activa una alarma que le indica a los especialistas que deben acudir allí para poder salvar al pequeño.
En promedio tres bebés perdían la vida cada año en Indiana por no contar con una iniciativa como esta.
Un joven llamado Hunter Wart leyó sobre las vidas que se habían logrado salvar con esta iniciativa y decidió trabajar para instalar una caja de bebés en su ciudad.
La instalación de este sistema tiene un precio elevado, especialmente para alguien tan joven como Hunter, pero él decidió que haría lo necesario.
Hunter tiene actualmente 19 años de edad.
Durante meses estuvo realizando trabajos como cortar el césped y vender chatarra. Le tomó algo de tiempo pero finalmente consiguió los fondos y trabajó junto al Departamento de Bomberos para hacer su sueño realidad. Tan sólo un par de días después, los esfuerzos de Hunter dieron resultados.
Hunter logró financiar los 10 mil dólares que cuesta instalar una de estas cajas.
Recientemente, una hermosa bebé fue hallada en la caja. Los bomberos acudieron de inmediato y la mantuvieron abrigada hasta que una ambulancia la llevó al hospital. Los médicos aseguran que la pequeña tenía tan sólo una hora de haber nacido.
Gracias a esta importante iniciativa, salvaron su vida. En agradecimiento a su gran trabajo, pidieron a Hunter que le pusiera su nombre: Mia.
“Definitivamente estamos agradecidos con su madre. Tomó la decisión de entregar a su hija de una manera segura”.
Se trata de una situación que rompe el corazón, pero lo más importante es brindar todo el apoyo y asistencia para garantizar la salud de los bebés. Son seres muy frágiles y no merecen quedar solos por horas en espera de alguien que los salve.
Ante los problemas sociales que atentan contra seres tan vulnerables y dependientes como los bebés recién nacidos, deberían existir más soluciones como esta. No te vayas sin compartir la maravillosa iniciativa que ya salvó una vida.