Un soldado del Ejército de los Estados Unidos sorprendió a su esposa al llegar de sorpresa a la habitación del hospital tras el nacimiento de sus mellizas. El sargento Skyler Cooper se encontraba desplegado en Kuwait con la Guardia Nacional de Kansas cuando su esposa dio a luz, el pasado 24 de enero.
Cydney Cooper pasó de ser una madre de dos niños a una de cuatro, tras el nacimiento de sus mellizas Emma y Kyla, pero su esposo no pudo acompañarla en ese momento tan importante. La cesárea se adelantó y las niñas nacieron a las 33 semanas de gestación.
El sargento Cooper junto a sus mellizas Emma y Kyla.
La cirugía se realizó en el Hospital Stormont Vail en Topeka, Kansas; lugar en el cual las niñas debieron estar 12 días más. Por esta razón, la sorpresa del sargento fue dada a su esposa mientras esta se encontraba aún en el centro de salud.
En un hermoso vídeo que ha conmovido a más de un corazón quedó registrada la tierna sorpresa. El sargento llega por detrás de su esposa, vistiendo su uniforme y con un ramo de flores en sus manos.
«Un año de locos, miles de kilómetros, 1 embarazo sola y un parto, 48.392 llamadas de Skype, algunos superhéroes, algunos viajes en avión, 12 días de UCIN, toneladas de ayuda de familiares y amigos, y muchas lágrimas después… Un soldado llegó a casa», escribió Cydney en Facebook.
CBS News
Además de sorprender a su esposa, el sargento decidió sorprender a sus hijos Leighton y Corbett, quienes se encontraban en casa de unos familiares y a los cuales tenía meses sin ver.
Las mellizas de esta pareja nacieron 7 semanas antes de lo programado, sin embargo, las bebés se encuentran sanas y han vuelto a casa junto a sus padres.
Esta familia es el símbolo de la triste realidad de muchas familias de soldados, quienes sufren el distanciamiento mientras estos héroes defienden el país en otras tierras. Por fortuna, los Cooper han vuelto a estar juntos y con más integrantes tras meses sin poder abrazarse.
Antes de irte comparte este emotivo reencuentro y coméntanos si conoces a alguna familia que pase por la tristeza de la separación. Quizás ya sea momento de sorprender a un ser querido.