El embarazo y el parto son algunos de los momentos más importantes en la vida de una mujer, pero también son procesos que provocan mucha ansiedad y estrés en algunas madres, y si a eso le sumamos la pandemia de COVID-19 que ha afectado a todos, la situación se vislumbra aún más complicada.
Dar a luz durante una crisis sanitaria como la que estamos viviendo genera muchos miedos y dudas y está causando estragos de todo tipo en muchas personas.
La rutina diaria se ha visto interrumpida de súbito, pero, lo más preocupante es el hecho de que en muchos países no se dispone de un servicio sanitario adecuado, justamente cuando más se necesita.
Esta es la historia de una madre India que, en medio del distanciamiento social impuesto por todos los gobiernos del planeta debió dar a luz de emergencia y tuvo que recorrer al menos 7 kilómetros a pie junto a su esposo en busca de un hospital para ver por primer vez al fruto de sus entrañas pero fue imposible y, sumida en la desesperación, se desmayó.
A pesar de la interminable caminata, la sufrida pareja no pudo encontrar un lugar idóneo para que la mujer pudiera dar a luz. Sin embargo, durante su búsqueda dieron con lo más que cercano a un centro asistencial que reuniera al menos las condiciones mínimas para tal fin: una clínica dental fue el sitio donde, finalmente, el bebé pudo abrir sus ojitos a la vida.
Afortunadamente, la Clínica Dental Krupa, en la ciudad de Bangalore, al sur del país asiático, apenas comenzaba a abrir sus puertas cuando el matrimonio la avistó, y los profesionales de la odontología no dudaron un segundo en prestarles toda la colaboración que tenían a mano y fue allí donde felizmente el neonato nació.
“Como estaba exhausta después de caminar durante horas, dio a luz a un bebé prematuro a los 5 a 10 minutos de llegar a la clínica”, dijo la doctora Ramya, quien dirige esta clínica dental.
Después de ver nacer a su tan esperada criatura, la emoción, sumada al cansancio por el largo trayecto que debió recorrer, la sacrificada madre perdió el conocimiento. Mientras, para aumentar la angustia, su esposo pensó que el niño había fallecido en el parto.
Es una hermosa bebé
No obstante, el hecho no pasó de un mal susto y todo el mal presagio se disipó cuando los médicos salieron de la sala dispuesta para el parto y afirmaron a ambos padres que el bebé se encontraba vivo y estable.
“Como no soy ginecóloga, no estaba segura de lo que debía hacerse. Llamé a mi esposo, que es médico general, y él vino de inmediato”, añadió Ramya
Después de eso, tanto el recién nacido como la madre fueron trasladados hasta el Hospital General en Malleswaram, una zona residencial de siglos de antigüedad, mundialmente famosa por sus venerados templos milenarios. Se podría decir, entonces, que este afortunado nuevo ser humano comenzó su vida en un lugar donde comenzó la Vida.
Esto nos enseña que una verdadera madre es capaz de darlo todo por un hijo. Son capaces de cualquier sacrificio por ellos, así que, vaya este pequeño relato como un homenaje de quien les escribe a todas las mujeres y madres.
Comparte esta historia con tus familiares y amigos, porque ser madre es un plus y para esta valiente no hubo barrera capaz de interponerse entre ella y esa primera sonrisa de su pequeño.