Ana Julia Quezada, presunta asesina de Gabriel Cruz, el niño de 8 años que desapareció el pasado 27 de febrero en Almería es de República Dominicana, llegó hace más de dos décadas a España y desde que se conoció su implicación en el crimen se está investigando su pasado.
Salió a la luz la muerte de su hija de 4 años en 1996, quien falleció en Burgos tras caer desde el séptimo piso del apartamento donde vivía, el cuerpo fue hallado por la pareja de Ana Julia para ese entonces. A pesar de que la muerte se registró como accidental se reabrirá el caso.
En su país de origen han reaccionado ante la noticia de su detención al encontrarla trasladando el cuerpo de Gabriel en el maletero de su auto.
Su familia asegura que no cree que ella sea una asesina.
Su hermano José Manuel Quezada ofreció declaraciones en las que alega que no cree que Ana Julia haya cometido el crimen.
“Lo encuentro extraño, nosotros somos muy humildes, nos ganamos el pan con el sudor de la frente. No creo que ella, que viene de abajo con sacrificio y esfuerzo, le venga un pensamiento y le arranque la vida a un inocente”, dijo el hermano de la detenida.
Mientras que la madre de Ana Julia Quezada, Juana Cruz, dijo: “Si es culpable, fue el demonio que la indujo a cometer el hecho”.
Desde la humilde comunidad donde vive en República Dominicana, La Cabuya, provincia de La Vega, la madre de Ana declaró que ninguno de sus hijos se ha visto involucrado en problemas legales. Pidió que se haga una investigación profunda para esclarecer los hechos.
Asimismo, relató que su hija Ana Julia era descuidada con su familia en República Dominicana y que se fue a España hace 26 años con sus hija.
Se pudo conocer que la hija de Ana Julia que vive en Burgos, de 24 años, quien perdió a su hermana menor en 1996 cuando cayó del balcón presuntamente por ser sonámbula, fue hospitalizada en el Hospital Universitario de Burgos por presentar una crisis de ansiedad al conocer la noticia de la detención de su madre.
Los familiares manifestaron su sorpresa y la describieron como alguien poco familiar, otro de sus hermanos confía en que es inocente y que todo debe tratarse de algún plan contra ella.
Juan José Quezada, otro hermano de la detenida, dijo: “Eso es un biberón que le estaban montando”, refiriéndose a un montaje para desprestigiar y acusar a su hermana.
El caso ha despertado interés en República Dominicana, mientras que en España algunos piden que sea deportada y pague la condena en el país caribeño. Comparte esta noticia.