El atroz crimen que cometió Ana Julia Quezada contra Gabriel Cruz sigue estremeciendo al país, la frialdad con la que actuó durante los días de búsqueda ha demostrado la crueldad con la que la acusada atentó contra la vida del niño.
En sus declaraciones, Ana Julia alegó que Gabriel la agredió, la insultó y pretendía atacarla con el hacha y ella en defensa propia lo golpearía hasta matarlo.
Pero tanto los agentes de la Guardia Civil como el juez encargado del caso no dieron credibilidad a esa versión.
Patricia Ramírez, la madre del “pescaíto”, ofreció declaraciones ante un medio de comunicación a través de un contacto telefónico y dijo que su hijo no pudo agredir a la asesina tal como ella alegó tras ser interrogada por las autoridades.
“Tengo claro que mi hijo no hizo nada de esas cosas, no era un niño que chille o que grite o que pegue, supongo que ella buscaría sus fines, pero el móvil del crimen lo tendrán que decir ellos”, refiriéndose a la policía.
“Yo tengo mi sensación personal y siento que esta mujer es un patrón que va repitiendo de un sitio a otro, que en este caso pueda ser por celos hacia mí, lo dudo, creo que es una cabeza enferma, es un patrón que tiene que repetir con fines económicos. Nos tendrán que aclarar cómo funciona la cabeza de esta mujer, yo creo que ella hubiese seguido haciendo daño.
Faltan muchísimas cosas por saber y supongo que a su debido tiempo iremos conociendo porque tendrá que ser así”, dijo Patricia.
Asimismo, aseguró que las declaraciones de la asesina no tienen fundamento, no duda de que su hijo sería incapaz de agredirla y menos de intentar hacerle daño.
“Gabriel era un niño noble, que sabía perdonar. Era un niño que no pegaba, no que se enojaba fácilmente que haya podido pegar, era un niño noble que resolvía hablando que supongo que aprendió de su padre y de mí, hablando, empatizando, esas palabras no me las creo”.
Continuó Patricia: “Mi hijo se enfadaba, pero era de puerta para adentro, era un niño grande, que perdonaba”.
Después de recibir la trágica noticia del hallazgo del cuerpo de su “pescaíto”, como cariñosamente le llamaba desde pequeño, ella explicó con una metáfora cómo se siente:
“Como el mar que ha estado con una marejada grande, grande y ahora esta con la resaca, todavía siguen llegando olitas…pues yo estoy igual”.
Patricia agradeció a las fuerzas de seguridad, a los ciudadanos y a los medios de comunicación por el apoyo que ha recibido todos estos días. Le contó a la periodista Susana Griso que vio la rueda de prensa que ofrecieron los investigadores de la Guardia Civil para explicar la “operación Nemo”.
Sobre eso expresó: “Han sido fantásticos, me emocioné con ellos porque creo que tuvieron un saber estar y creo que dieron una lección de saber hacer y de humanidad y sensibilidad que desde aquí trasladarle nuestro agradecimiento porque nos tenemos que quitar el sombrero con ellos”.
La madre de Gabriel encontró consuelo en la carta que escribió el joven sevillano y se hizo viral. “Me consuelo con el cuento, en la cárcel está la bruja y el pescaíto la ha parado. Creo que hubiese seguido de alguna manera o de otra haciendo daño”.
Patricia y Ángel, los padres de Gabriel se han mostrado siempre serenos y fuertes ante la dura situación que enfrentaron desde la desaparición de su hijo de 8 años.
“Teníamos un instinto y era duro luchar contra el instinto que teníamos, pero es que cuando está tu hijo pues tienes que asesorarte y tienes que hacer lo que te dicen y creo que hemos trabajado bien, ha sido difícil, pero creo que lo hemos hecho bien porque la bruja está en la cárcel”, dijo Patricia.
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También comentó que su trágica experiencia ha sacado lo mejor de las personas, pide que no se pierda esa oleada de bondad porque habrá más Gabrieles.
Patricia es un ejemplo para todos de humildad, nobleza, y resiliencia, en medio del dolor que embarga su corazón por la muerte del “pescaíto” nos invita a refugiarnos en lo bueno. Comparte su mensaje.