Cuando luchas intensamente por un sueño pero en el momento menos pensado ves que todo se derrumba, es cuando agradeces tener un ángel cerca que al menos te ayude a sobrellevar el duro momento.
Es lo que sucedió en el último partido en el que se enfrentaron el tenista argentino Juan Martín del Potro con el español Nicolás Almagro.
En un mar de lágrimas, Almagro tuvo que abandonar por una molestia en su pierna izquierda
Y el gesto de Del Potro ha conmovido al mundo entero
Del Potro es uno de los tenistas más considerados dentro del circuito. El argentino es aclamado por el público y también muy respetado por sus rivales. En el partido de segunda ronda de Roland Garros pasará a la historia no por su pericia con la raqueta, sino por el gesto fraternal con su rival.
Estaban jugando el tercer set empatados en 1 cuando Almagro se cayó al ir a buscar una pelota. Previamente, el partido se había detenido durante 10 minutos porque el español había pedido asistencia médica por un dolor en sus rodillas y en consecuencia no podía volver a pedir auxilio.
APF
Con mucho esfuerzo y tenacidad, el tenista siguió jugando un par de puntos más, pero su dolor fue más fuerte y cuando ya no pudo más, abandonó. Se tiró al suelo y empezó a llorar desconsoladamente.
La escena fue desoladora y fue entonces cuando el argentino cruzó la red y lo empezó a animar y consolar. Le ofreció agua y le dio palabras de aliento. Más adelante y cuando ambos estaban sentados, Del Potro empezó a acariciarle la cabeza a su rival, quien no hacía más que llorar.
ESPN
Para Almagro este incidente suponía una importante frustración, ya que su carrera se había visto deteriorada en los últimos años por continuas lesiones y ya estaba recuperando su nivel.
Almagro salió del abrazo fraternal de su rival y así lo recogió en su cuenta de Twitter:
Por su parte, Almagro mostró su agradecimiento frente a todas las atenciones recibidas:
Aquí puedes ver el video del gesto de Del Potro con Almagro, que se viralizó de inmediato, por el emotivo momento:
La Nación
No es la primera vez que Del Potro nos sorprende con sus gestos solidarios. Hace un año tuvo un gesto con una niña recoge-pelotas, que al parecer estaba sufriendo mucho dolor después de un golpe de pelota sin intención provocado por otro tenista. De la misma manera, Del Potro se acercó a la niña, interrumpió el partido y pidió asistencia de inmediato.
Sin lugar a dudas este tipo de gestos agrandan mucho las figuras de los deportistas, pero más allá de eso, esta reacción deja ver que detrás hay un ser humano sensible y solidario. Independientemente del momento, Del Potro sabe conseguir que los demás se sientan mejor gracias a su actitud.
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