El COVID-19 que ha desatado una pandemia mundial se originó en China, el virus alojado en animales fue transmitido a los seres humanos y las consecuencias han sido devastadoras.
En todo el mundo se han registrado 745.308 pacientes infectados y 35.307 han fallecido a causa del coronavirus.
La Organización Mundial de la Salud recibió información detallada de la Comisión de Salud sobre el brote el 11 de enero de 2020 aunque comenzó el año pasado.
Según la OMS hay pruebas concluyentes de que el brote se originó por exposiciones de animales en un mercado de pescados y mariscos de Wuhan, este establecimiento fue cerrado el 01 de enero de este año. En China, las autoridades aplicaron medidas de seguimiento y ampliaron los estudios epidemiológicos.
China informó el 12 de enero la secuencia genética del nuevo coronavirus, información vital para que otros países pudieran desarrollar kits de diagnósticos específicos.
Después de la pandemia que afecta al mundo entero y de que China lograra controlar la propagación del contagio, se reportó que reanudaron la venta de murciélagos y escorpiones.
Las impactantes escenas salen a la luz cuando China levantó el bloqueo nacional de una semana e instó a los ciudadanos a volver a una vida normal.