Los hechos sucedieron debido a que por un accidente doméstico, el niño fue llevado por sus padres al Hospital Civil de Oaxaca, el 26 de noviembre de 2017. Pero por estar en paro de actividades, ante la emergencia se vieron obligados a trasladarlo al Hospital Privado del Valle, en Santa María Atzompa, en Oaxaca.
En tal establecimiento fue atendido por el médico acusado, quien dio la orden de intervenirlo quirúrgicamente. Cuando el niño fue sometido a la primera exploración médica, se sabía que tenía alimentos en el estómago, por lo que recomendaron esperar. Sin embargo, tan solo un tiempo después, el médico tratante ordenó su ingreso a quirófano.
Se trataba de una operación aparentemente sin nada de riesgo, le pondrían unos clavos para estabilizar el hueso, cirugía que duraría alrededor de una hora.
Pero trasncurrían los minutos y las horas, y no les daban razón del estado del pequeño. Sólo que todavía no despertaba. Había ingresado a la sala de operaciones a las 11:00 p.m, fue recién a las 4:00 a.m. del día siguiente cuando ante la insistencia de los padres, les notificaron que permanecía sin reaccionar.
Desesperados, los padres buscaron otro hospital para llevar a su pequeño, pero fue rechazado debido a que ya había sido intervenido en otro centro. Hasta que finalmente pudieron llevarlo al Hospital San Lucas, donde finalmente declararon su deceso a las 6:40 a.m.
El informe reveló que «el menor presentaba fallas en el organismo, tras la aplicación de un medicamento no anestésico, el cual no se había señalado en el expediente original».
Los médicos acusados por negligencia médica son la anestesióloga Gabriela C.L., quien cuenta con un amparo legal, y Pérez Méndez, ingresado en el penal de Ixcotel, donde permancerá mientras dure la investigación.
Este es un caso sin precedentes, la primera vez en la historia jurídica de Oaxaca en la que se le vincula a proceso a un imputado por la comisión de un delito realizado con dolo eventual.
Sin embargo, la comunidad médica encabezada por los sindicalizados del IMSS y diversos médicos particulares, han expresado su solidaridad con su colega, y alegan que es injusta la causal del proceso del médico acusado, ya que no se trataría de un homicidio doloso, tratando de salvar la buena fe del supuesto responsable.