Al parecer el éxito del tema “Despacito” apenas comienza, las redes sociales se inundan de vídeos, coreografías y comentarios entorno a esta canción que está contagiando a muchos países con su ritmo.
En esta oportunidad, Luis Fonsi compartió en su perfil de Instagram un vídeo que lo conmovió mucho.
Y seguro que a ti también te robará el corazón y te inspirará a seguir adelante, prepárate para verlo:
Luis Fonsi escribió en su publicación “Se me aguaron los ojos al ver esto, ¡lo que es el poder de la música! Esto pone en perspectiva las cosas verdaderamente importantes en la vida. Salud, amor, fe, familia…Que mucho nos enseñan los niños”.
Pero detrás de la emotiva escena de la niña bailando “Despacito” desde la habitación de un centro hospitalario hay una emotiva historia.
Esto sucedió en el hospital Puerto Montt de Chile, y una organización Clowntagiosos fue la responsable del vídeo que ahora está cautivando a miles de personas.
Ellos son un grupo de voluntarios que visitan el hospital ataviados de payasos con accesorios muy coloridos y su bata blanca, para que los más pequeños puedan sonreír.
No es fácil estar en un hospital, un espacio frío y donde el dolor se hace presente así como exhaustivos tratamientos que muchos niños tienen que enfrentar junto a sus familiares que no saben cómo controlar sus sentimientos de angustia y desesperación.
Por eso la labor voluntaria de Clowntagiosos es indispensable, porque logra abrirle las puertas a la alegría, a los colores, a las sonrisas y esa es la mejor medicina.
A pesar de que no podían entrar a la habitación de esa pequeña eso no fue limitante para alegrar su corazón y frente a las ventanas se encargaron de regalarle un momento inolvidable mientras bailaban juntos al ritmo de “Despacito” como parte de un reto que crearon llamado #DesafíoDespacito que consistía en bailar la canción en todo el hospital.
La niña sobre su cama sonreía y no dejaba de seguir los pasos de estos divertidos doctores que a pesar de que estaban separados por un vidrio le transmitían amor y cercanía.
¡Bravo por esta labor! No tiene precio lo que hacen y el impacto que logran en los pacientes y en sus familiares es grandioso.
No te vayas sin compartir esta emotiva escena con tus seres queridos.