Bien dice que la realidad supera por mucho la ficción, por ello, a la hora de hablar de héroes dejamos de lado las máscaras y capas para referirnos a aquellas personas que arriesgan su vida para salvaguardar a otras. Esto fue lo que hicieron dos guardias civiles para salvar a un joven que estaba encerrado en su casa mientras ardía en llamas.
Eva Iglesias López y Samuel Rodríguez López estaban de guardia cuando cerca de la una de la madrugada recibieron una llamada que los hizo movilizarse con mayor rapidez.
Iglesias y Rodríguez son guardias civiles en el puesto principal de Artexio, provincia La Coruña, España.
En la urbanización Sol y Mar, en la parroquia de Oserio, se había producido un incendio en una de las viviendas. Iglesias y Rodríguez fueron los primeros en llegar así que sin perder más tiempo abandonaron la patrulla y salieron corriendo.
Si bien no están preparados para enfrentar este tipo de situaciones sabían que dentro de la casa había alguien que necesitaba ayuda y ellos no estaban dispuestos a abandonarlo.
Se trataba de un joven de 19 años de edad.
Los agentes ingresaron a la casa, subieron a un segundo nivel y había mucho humo, era tan denso que causaba dificultades para ver y desplazarse en el lugar.
En medio de las llamas había un joven que pedía auxilio, no podían esperar que llegaran los bomberos así que decidieron actuar, de lo contrario era posible que el joven muriera ya que el fuego estaba invadiendo toda la casa.
Eva Iglesias López es de Coruña y Licenciada en Filología Hispánica, se define como “agente de vocación tardía.”
Eva e Iglesias gatearon uno detrás del otro hasta ingresar en una habitación cubierta totalmente de humo, de repente, se toparon con las piernas de la persona que pedía ayuda. Los agentes lograron arrastrarlo fuera de la habitación.
El joven tenía todo su cuerpo ennegrecido y estaba en shock, los policías insistieron en preguntarle si había alguien más en la casa pero no obtuvieron ninguna respuesta.
Samuel Rodríguez López es de San Pedro de Buxantes, Dumbría.
Sacaron al joven de la zona de peligro y lo sentaron en una posición que le permitiera respirar y sin medir el riesgo decidieron regresar a la casa.
De nuevo, gateando, revisaron toda la casa tocando las camas y muebles en busca de personas, por suerte, no había nadie más.
Los agentes de la guardia civil ya estaban sintiendo los efectos de la inhalación de humo y buscaron desesperadamente la salida hasta que lograron llegar a la puerta principal.
Los tres lograron sobrevivir y contar tan arriesgada historia.
Los paramédicos llegaron y trasladaron al joven al hospital, los agentes también recibieron atención médica, ambos estuvieron vomitando durante los dos días siguientes como consecuencia de tanta inhalación de humo.
Su valentía y coraje salvó la vida de un joven y ganó el reconocimiento de la guardia civil para quien prestan sus servicios.
Los agentes demostraron su compromiso de velar por la vida de los ciudadanos, arriesgaron la suya para preservar la del joven que estaba en grave peligro. Comparte este rescate y celebremos su valentía.