Todos los que tienen pequeños en casa saben que son una fuente inagotable de alegrías. Pero nadie niega que así también requieren de infinitos cuidados y los padres no pueden despegar sus ojos de ellos ni un segundo porque son conscientes que un mínimo descuido podría traer resultados fatales.
Es por eso que durante el verano, en todas las actividades en torno a las piscinas y al agua, los adultos deben estar especialmente prevenidos, si no quieren lamentar una dolorosa tragedia que claramente puede evitarse con pocas medidas de prudencia que se tomen a tiempo.
Tal como sucedió con un inocente bebé que estuvo a punto de perder la vida ahogado debido a un grave descuido de sus padres.
Los hechos sucedieron la mañana de este sábado en las instalaciones del hotel Lis, ubicado en la calle Margaluz, en la zona de Sant Agustí, en Palma de Mallorca (España).
Los padres del pequeño de 19 meses, de nacionalidad holandesa, de quienes no se ha revelado la identidad, se encontraban de veraneo en las instalaciones del hotel mallorquino.
No se conocen con detalle las circunstancias del descuido, pero los medios locales revelaron que al parecer ambos se quedaron dormidos mientras tomaban el sol en una de las terrazas del hotel.
Aunque hubieran sido segundos, fue el tiempo suficiente para que su pequeño bebé decidiera explorar todo aquello que era nuevo para él, sin que pudiera medir el peligro.
En cuestión de segundos comenzó a gatear a toda velocidad y terminó cayendo en la piscina.
Como era de suponer, el pequeño empezó a luchar por su vida mientras los padres dormían. Pero afortunadamente, dos ángeles como enviados del cielo, llegaron justo a tiempo para darse cuenta del peligro. Eran dos jóvenes turistas, huéspedes del mismo hotel, que sin dudarlo se lanzaron al agua para salvar la vida del bebé.
Tras sacar al pequeño de la piscina, inmediatamente los trabajadores del hotel despertaron a la madre para alertarle de lo sucedido.
Y según los medios locales, fue la propia madre quien reaccionó de inmediato y le proporcionó respiración boca a boca, mientras los servicios de emergencia se presentaban en el lugar.
Tras las primeras maniobras de reanimación, ambulancias del SAMU, personal de la Policía Local y la Policía Nacional se trasladaron al hotel para atender al menor y a su familia.
Finalmente lograron estabilizarlo, recuperando sus constantes vitales, después de lo cual el bebé fue trasladado al centro hospitalario Son Espases.
Se difundieron imágenes del momento en que el pequeño, ya con vida, era atendido en la ambulancia.
Se puede escuchar su llanto desconsolador que ha estremecido a muchos.
Es estremecedor pensar que pudo haber un trágico final, no se trata de hallar culpables pero compartamos esta noticia para crear conciencia sobre la responsabilidad de los padres, especialmente cuando hay piscinas de por medio. ¡Un descuido de un segundo podríamos lamentarlo para toda la vida!