Hoy el mundo entero celebra el día del amor, una fecha para crear recuerdos imborrables. Pero para otros esas historias de la vida real, que parecen sacadas de películas, pero que son más verdaderas que la vida misma, a veces terminan para siempre por la razón más desgarradora.
Es el drama de los hijos Rodríguez, que tuvieron que decir adiós a sus padres de 67 años, ambos fallecidos por Covid 19 en el mismo día.
Juan y Blanca Rodríguez se enamoraron cuando eran adolescentes y tuvieron 4 hijos
Todos los que los conocían hablaban de su maravillosa historia de amor; pero hoy, devastados no pueden creer que haya acabado de la peor manera.
Llevaban décadas juntos, y nunca se habían separado, hasta que el nuevo coronavirus vino como un ladrón para robarles su salud y la de toda su familia, para después arrebatarles la vida.
La pareja de origen latino, que vivía felizmente jubilada, al sur de San Diego, California, dijo que para ellos fue una absoluta sorpresa, ya que tomaron todas las precauciones para mantenerse a salvo.
“Nos pusimos en cuarentena, no salimos, no fuimos a las tiendas”, relató una de las hijas, Blanca Rodríguez.
En enero la familia entera se contagió de coronavirus.
Justo cuando los hijos se estaban recuperando, los síntomas de Juan y Blanca empeoraron drásticamente. Así que el 1 de febrero ambos fueron trasladados de urgencia a dos hospitales diferentes. La familia tuvo que resignarse a verlos únicamente a través de la pantalla del teléfono.
Y a través de una simple llamada de Zoom, se despidieron de sus padres para siempre. ¡Es desgarrador!
«Ella habló con nosotros, nos envió un mensaje de texto. Entonces pensamos, ‘Mamá se pondrá bien. Tenemos que preocuparnos por papá'», dijo otra hija.
Mientras, la condición de Juan empeoraba cada vez más, así que desde el hospital advirtieron a la familia que lo mejor sería que se despidieran.
“Mi mamá estaba en la llamada de Zoom. Le dijo a mi papá que estaba feliz de compartir su vida con mi papá y le agradeció por ser el amor de su vida”, agregó entre lágrimas la hija.
Sin embargo, cuando pensaron que su mamá resistiría sucedió algo inesperado. Apenas 3 horas después de esa llamada, Blanca dejó de responder a la medicación y falleció el 8 de febrero.
Y como suele suceder en las parejas que se han amado desde siempre, y que piensan, sienten y sufren, al unísono; su esposo decidió no dejarla partir sola.
Blanca y Juan murieron con apenas 3 horas de diferencia
Y así fue cómo sin más, sin un beso en la frente, sin una caricia para confortarlos en el dolor, sin aunque sea un «nos volveremos a encontrar», el virus no le perdonó la vida a esta historia de amor.
Blanca murió a las 12.30 a.m,; y Juan, a las 3:30 a.m.
“Él no podía vivir sin ella, así que simplemente dejó de luchar”, relató entre lágrimas la hija Blanca.
Por su parte, su hija Cynthia recordó llorando cómo inició su hermosa historia: “Vio a mi mamá en el salón de séptimo grado. Y dijo que en el momento que la vio, supo que se iba a casar con ella”.
«Era como si supiera que su alma gemela se iría pronto. No podía vivir sin ella, así que simplemente la dejó ir».
Una historia tan épica merecía terminar al menos con una compensación así, marcharse juntos el mismo día para seguirse amando en la eternidad, lejos de pandemias que no respetan nada, ni siquiera al amor verdadero.
Enviemos un mensaje de solidaridad a sus hijas que no encuentran consuelo en medio de tanto sufrimiento. ¡Comparte esta noticia!