En ocasiones, las ansias de pasar un buen rato, de divertirse y olvidarse un poco de la monotonía del día a día, puede llevar a las personas a cometer una gran insensatez. Este es, sin lugar a duda, el caso del joven de 20 años que decidió «llevar de paseo» a su mejor amigo, quien se encuentra en silla de ruedas.
El absurdo hecho tuvo lugar en Harrogate, Inglaterra, cuando Michael Ward, de 20 años, fue capturado conduciendo por el centro de la ciudad, mientras llevaba a su amigo William MacPherson, en silla de ruedas, remolcado en la parte trasera de su auto. Una maniobra impresionantemente peligrosa que pudo haberle costado la vida a William o a otras personas que se encontraran en la vía.
Michael y William se estaban divirtiendo un montón, sin embargo, al equipo de la policía de Harrogate Road no le causó ninguna gracia lo que estaban haciendo.
Por lo que puede observarse en el video tomado de las cámaras de seguridad de la ciudad, el clima estaba lluvioso y el pavimento se encontraba bastante mojado.
Además, también se evidencia cómo William pierde el control y se suelta en repetidas ocasiones del Hyundai Tiburon de Michael… Así que no es muy difícil concluir que esta no era la mejor idea de todas.
«No les importó la seguridad de los otros usuarios que transitaran el camino y decidieron deliberadamente actuar de una manera muy peligrosa», explica uno de los oficiales de policía que atendió el caso.
«Espero que esta sentencia los haya ayudado a aprender la lección, tanto a ellos, como al resto de las personas, de que el comportamiento imprudente no será tolerado en estas vías».
¿Y cuál fue la sentencia? Michael se declaró culpable de comportamiento peligroso al volante, por lo que su licencia fue suspendida durante 20 meses. Asimismo, se ve en la obligación de completar 200 horas de servicio comunitario y debe pagar una multa por un monto de 221 dólares. Por su parte, Willian también se declaró culpable de «aferrarse a un vehículo con el propósito de ser arrastrado» y fue multado por un total de 270 dólares.
La aventura de William y Michael no duró más que unos pocos metros, hasta que llegaron a la meta final: disfrutar de unos no tan bien merecidos Big Macs. ¿Acaso esta broma valió todas las consecuencias que ahora deben enfrentar? o, aún peor, ¿vale el riesgo de resultar herido o herir a alguien más? ¡Claro que no!
¿Estás de acuerdo con las medidas que se tomaron contra este par de amigos? ¡Cuéntanos tu opinión y comparte esta noticia con tus amigos!