Son muchas las personas que ante la mínima dificultad se quejan, ahogándose en un vaso de agua. Sin embargo, hay otras que no han tenido nada fácil en la vida, para quienes los verdaderos problemas no son más que retos, y no descansan hasta conseguir sus metas.
FUNDAL es una fundación sin fines de lucro, radicada en Guatemala, dedicada a la inclusión educativa, social, recreativa y cultural para niños con sordoceguera y discapacidad múltiple. Y recientemente, sin pensar en lo que sucedería después, compartieron un video de algunas de las niñas que acuden a su centro, que ha tocado la fibra de millones de corazones, convirtiéndose en viral en minutos.
Las escenas muestran a dos niñas de 5 años, con discapacidad visual: Mía y Valentina.
Valentina enseña a su amiga Mía, en medio de la escena más conmovedora, cómo caminar con su bastón y guiarse con la otra mano.
Las dos niñas no videntes viven en Guatemala, y es increíble cómo se ayudan la una a la otra a descubrir el mundo. Un auténtico ejemplo de vida, compañerismo y superación.
Los profesores de las pequeñas se quedaron atónitos al ver cómo Valentina iba conduciendo a su amiga, sin que nadie se lo hubiera pedido.
«Agarra ahí, vas a ir así con el dedo. Lo vas a poner aquí, y ahí vas a ir agarrándolo sin más…», empieza la explicación de la dulce Valentina.
«Acá va el dedo índice, acá va… Y ahí vas moviendo el bastón así, así»
Después la pequeña sigue con la clara explicación a su amiga:
«Y con la otra mano vas explorando, ¿Sí? Vas explorando así… Acércate un poquito más y vas explorando».
Inmediatamente, Valentina quiere darle más seguridad a Mía, y dice con fuerza, dejando a las redes con lágrimas en los ojos:
«Yo voy aquí contigo por si te quiere pasar algo», le dice Valentina a Mía, mientras sostiene la mano de su amiga para enseñarle.
Incluso, después, cuando ve que Mía se equivoca, no duda en corregirle con firmeza pero con cariño:
«No Mía, sigue enfrente tuyo… Yo voy aquí…», concluye la tierna enseñanza de Valentina antes de que el par se encuentre con los profes en el pasillo. Y luego recibe además palabras de ánimo de ellos también: «Aquí vamos, aquí vamos todos».
Y Valentina agrega una vez más: «Y yo te voy a ir acompañando por si te quiere pasar algo».
Nada como la inocencia y el espíritu de lucha y compañerismo de los niños de condición especial:
Muchos han aplaudido los hermosos sentimientos de la pequeña y el grandioso trabajo en equipo, que refleja el apoyo recibido de sus maestras, terapeutas y familiares.
En FUNDAL revelaron que Mía es más bien una niña callada, pero con un corazón dulce y siempre se mantiene con una sonrisa. Mientras que Valentina es extrovertida, conversona y le gusta mucho colaborar con sus maestros. Ambas han logrado apoyarse lo suficiente para ser dos niñas más fuertes e independientes, a pesar de su discapacidad visual.
Han estado asistiendo a la fundación desde que tenían 1 año, momento en el que ni siquiera caminaban y pasaban llorando todo el día al ser conscientes de su limitación. Pero ahora, ya con 5 años, son autónomas y sobre todo las mejores amigas del mundo.
FUNDAL ahora celebra que Mía y Valentina han podido ingresar a una institución regular en la que se les brinda un acompañamiento especial a niños con discapacidad.
Es maravilloso todo el trabajo que hacen los profesionales con estos pequeños, dejándose la vida para que cada uno brille explotando su potencial, sin cobrar un solo dólar por sus servicios.
Comparte esta grandiosa historia de amor que nos calienta el alma y nos devuelve la fe en la humanidad.