Cuando a Jahmaul Allen se le ocurrió ponerse a bailar en plena pista de aterrizaje del Aeropuerto Internacional Pearson de Toronto, mientras el avión se preparaba para el despegue, inocentemente pensó que los únicos espectadores de sus divertidos movimientos serían los pasajeros a bordo.
De hecho, lo había hecho porque se dio cuenta de una pequeña niña que estaba llorando desconsolada y pensó que esa sería la mejor manera de alegrarle el día.
Jahmaul Allen, de 28 años, trabaja como agente de rampa para American Airlines desde hace 2 años.
Sin embargo, jamás imaginó que varios pasajeros no perderían la oportunidad de capturar el imperdible momento en vídeo y que correría como la pólvora en las redes sociales, donde sólo en Twitter ya ha sido visto casi 2 millones de veces.
«Sentí que necesitaba alegrar la vida de esa niña. Vi que la hice sonreír, así que seguí bailando», declaró Allen a los medios después de que se hubiera convertido en la sensación de la red.
«Dejó de llorar, y la madre estaba allí aplaudiéndome, animándome a bailar más, así que seguí bailando«, dijo en otra entrevista.
Las divertidas imágenes muestran a Allen dirigiendo el avión antes de agregar a sus señales de rutina una serie de sacudidas, contorsiones y gestos entusiastas con los señaladores del camino, mientras los pasajeros no podían contener las carcajadas al ver a este empleado que les hizo el día.
«Me encanta lo que hago y me encanta hacer felices a los pasajeros», dijo el «bailarín» del aeropuerto.
Quién dijo que ser empleado de un aeropuerto signifique ser un tipo frío y aburrido. Se nota que tiene pasión por lo que hace y que por supuesto no tiene miedo al ridículo.
Una de las pasajeras que capturó el video fue la usuaria de Instagram @ekaterina_irko, quien lo compartió en su cuenta de Instagram, y a partir de ahí se hizo viral en las redes.
«¡Canadá está encendido! Este hombre es el héroe de nuestro viaje americano», se lee junto al video del momento que no te lo puedes perder:
Allen ha dicho que las personas a bordo de los aviones ahora lo reconocen y que todavía baila de vez en cuando en la pista.
Pero todavía se encuentra impactado al ver que su video ha dado la vuelta al mundo y realmente se alegra de haber calmado aunque sea por un minuto a la pequeña.
«Por lo general, no tengo un impacto en nadie. Nadie se da cuenta de que estoy ahí realmente. Entonces, que esto haya sucedido es para mí una bendición«, reconoció el empleado.
Allen, que quiere ser piloto algún día, dice que le encanta hacer felices a los pasajeros.
Sin embargo, algunos se quedaron preocupados de que con sus bailes pudiera entorpecer las directrices hacia las aeronaves, pero Allen confirmó a los medios que los pilotos nunca están confundidos.
«El piloto tiene su camino trazado perfectamente. Sabe a dónde se dirige, dónde se va a estacionar y mis movimientos de baile no le interrumpen en lo absoluto«, concluyó.
Comparte este divertido video con todos tus amigos y alégrales el día.