Trey Ganem es un reconocido empresario de Estados Unidos, propietario de SoulShine Industries, pero sobre todo un gran humano y filántropo.
Al hombre el drama de la escuela en Texas no pudo dejarlo indiferente. Así que, ya que su empresa precisamente se dedica a la personalización de féretros -para hacer de la partida de este mundo algo más llevadera-, no dudó en ofrecer su ayuda desinteresada a los padres de los niños fallecidos.
El empresario diseñó personalmente uno por uno los 19 ataúdes y los donó a las familias de Uvalde
Trey, de 50 años, primeramente se reunió con cada familia para poder conocer de primera mano todos los recuerdos especiales, ilusiones y sueños de cada pequeño.
Esa sería la única manera de poder plasmar y materializar en esos pequeños ataúdes el mundo interior de cada niño, y que sus padres tuvieran el mejor consuelo antes de darles el merecido último adiós.
Cada ataúd tendría algo alusivo a sus personalidades, deportes, pasiones y personajes favoritos
Aunque SoulShine Industries suele cobrar hasta 4.000 dólares por cada trabajo, Trey asumió todos los gastos de fabricación y logística hasta asegurarse que los hermosos ataúdes terminados llegaran a tiempo a manos de cada familia.
Trey tuvo que contactarse con un fabricante de Georgia, quien sabiendo para quién serían esos ataúdes no dudó en trabajar sin descanso durante 20 horas seguidas para entregar los pedidos a tiempo.
Otro asunto complicado de resolver fue el traslado de los ataúdes desde Georgia, así que otro amigo que tiene una empresa de transportes se comprometió a ir a recogerlos en un viaje de 26 horas, con tal de que llegaran a su destino.
Trey, que trabaja con su hijo Billy, no paró de trabajar en los diseños desde el pasado viernes, más que para dormir un par de horas. Eso sí, no estaban solos, afortunadamente contaron con el apoyo de decenas de vecinos solidarios que se sumaron a la causa.
Finalmente, se diseñaron 19 ataúdes: 18 para los niños y 1 para una de las maestras. Indudablemente, la carga de tensión y emociones que supuso todo el proceso para Trey, fue tan fuerte, que lo dejó en estado de shock.
“Ha sido una montaña rusa extremadamente emocional para mi. Ni siquiera sé si puedes oír mi voz y no he gritado nada, pero estoy perdiendo la voz por alguna razón”, declaró a los medios locales.
Algunos pedidos de los padres fueron bastante específicos y Trey se esmeró en complacer a todos.
La cajita de Eliana, una de las pequeñas fallecidas, por ejemplo estuvo decorada con un diseño de llamas, el logo de TikTok, que era su pasión, y un toque de limo amarillo neón, que simboliza la pasión de la niña por el softball.
Otros tenían dinosaurios con linternas y cuernos de unicornio, superhéroes y hasta princesas de Disney.
“Me llevo algo de cada experiencia con cada familia porque cuando explicaban cosas sobre su hijo, se les iluminaban los ojos. Era como, ‘oh, por cierto, le encantaba esto, y esto… ¿Sabes?#8217;”, explicó el empresario.
“Estamos aquí para tratar de hacer que un momento difícil sea un poco más fácil. Realmente no hay nada que podamos hacer para que sea más fácil, pero ese es nuestro objetivo: ayudar a las familias y comenzar su duelo y su curación, y simplemente tratar de hacer algo especial para ellos”, agregó realmente emocionado.
«Solo quiero ver sonreír a las familias por una sola vez y quitarles su dolor».
El ataúd de Gian Carlo Guerrero tocó especialmente el corazón de su familia. Al punto que una familiar escribió en Facebook:
«Tantos sentimientos encontrados cuando vi el ataúd de mi sobrino. Pero es exactamente lo que amaba… ¡Te amo Gian!».
Las misas fúnebres en la Iglesia Católica del Sagrado Corazón han dado inicio desde el pasado martes, mientras que el Centro de actividades para adultos Herby Ham está reservado para recepciones fúnebres durante todo junio.
A su vez, la funeraria local, Rushing-Estes-Knowles Mortuary, que atiende a 17 de las 19 familias de niños, tiene funerales reservados hasta el 13 de junio.
El gesto de solidaridad, amor y empatía de este admirable empresario no tiene precio. Ciertamente, nadie puede devolver a estos padres a sus pequeños pero estos detalles quedarán grabados en su corazón como el mejor bálsamo para el dolor. ¡Bravo, Trey!