Pocos minutos sin supervisar a un niño son suficientes para que ocurra un incidente, ellos no tienen conciencia del peligro durante sus primeros años de vida. Por eso es tan importante que sean vigilados de forma permanente mientras se les explican los riesgos de su entorno según su capacidad de comprensión.
En esta oportunidad un niño encontró una maquinilla eléctrica y afeitó su cabeza y la de su hermana.
Teddy afeitó su cabello y después el de su hermana Eloise, cortó sus trenzas rubias dejándola casi sin cabello en la parte posterior de su cabeza.
Stephie Leigh, madre de los niños, se mostró horrorizada, no podía creer lo que veía cuando encontró a sus hijos y descubrió lo que habían hecho.
Relató que cuando le preguntó a su hija si le había gustado su nuevo corte de pelo ella respondió: “No”.
Eloise le preguntó a su madre su podía “quitarse el pelo”, ella la consoló diciéndole que le volvería a crecer. Al ver su apariencia se sintió triste y dijo que parecía un niño.
Al verla tan afligida, la madre le dijo que igual se veía hermosa, su hermano solidario intervino para decirle que a pesar de que tuviera el corte de cabello de un varón, su rostro seguía pareciendo el de una niña.
Stephie asumió la situación de la mejor forma posible, a pesar de que sus pequeños pudieron sufrir lesiones usando el artefacto eléctrico no hubo nada que lamentar. La única consecuencia era lidiar con la pérdida de su cabello trabajando para que no afectara su autoestima.
Ella los llevó a la peluquería y la única solución posible fue terminar de rapar sus cabezas. La madre compartió las imágenes de la travesura de sus hijos causando sensación en las redes.
En uno de los vídeos que compartió en su perfil de Twitter se aprecia cómo los niños sonríen con su nuevo corte de cabello mientras juegan en pijama en su casa.