Un joven médico le está dando un nuevo significado a la “atención personalizada” con un gesto excepcional que celebra y honra el nacimiento de los bebés. Por cada bebé que ayuda a traer al mundo cose una manta bordada que incluye el nombre, fecha de nacimiento, peso y altura.
Cuando la madre regresa a la consulta después de dos semanas de haber dado a luz simplemente no puede creer cuando él le dice: “Tengo algo” y le entrega el obsequio.
En tan solo un par de años, el Dr. Erik Bostrom realmente se hizo famoso en el Riverwood Healthcare Center en Aitkin, Minnesota, Estados Unidos donde comenzó la tradición poco después de unirse al equipo médico del este centro de salud rural.
El Dr. Erik de 33 años como médico de familia atiende a pacientes de todas las edades. Pero encontró la mayor fuente de felicidad y entusiasmo cuando hay una nueva vida conociendo el mundo.
Dice que “es una parte genial de la medicina, un momento de emoción y alegría, algo realmente extraordinario”, compartió.
Pronto se encontró queriendo hacer algo especial para los bebés. Al principio, admitió que no tenía ni idea de cuál es el regalo perfecto para los padres y el niño.
Una colega enfermera le sugirió la idea de hacer las mantas, pero el Dr. Erik tenía dudas al respecto, estaba perdido en este tema, así que le dijo que no creía que pudiera hacer eso, «He cosido mucha piel, pero nunca cosí telas».
Sin embargo, decidió intentarlo después de ver vídeos tutoriales y pedir consejos a su madre y su cuñada. Compró una máquina de coser usada.
Por fortuna, su cuñada que hace almohadas decorativas para ganarse la vida dio un paso adelante para enseñarle a usarla y hacer su primera manta, siguió practicando porque quería hacer algo realmente especial para sus pacientes.
“Me enseñaron a usar una máquina de coser. Me di cuenta que hacerla funcionar fue mucho más fácil de lo que pensé que sería”, dijo el Dr. Erik.
A pesar de tener un horario muy apretado en su trabajo encontró tiempo para tales tareas.
Después del primer año la persona que le ayudaba con el bordado se mudó, finalmente compró una máquina que se puede usar para coser y bordar. ¡El doctor aprendió a dominarlo y el resto es historia!
Sonríe mientras comenta que «En la tienda tenían muchas máquinas Husqvarna, que realmente me llamaron la atención, ya que es la misma marca que mi motosierra».
Desde que se acostumbró a coser, el Dr. Erik ha hecho a mano una manta para cada bebé que trae al mundo.
Hacer las mantas personalizadas le toma al menos de 3 a 5 horas de su precioso tiempo, estima que ha hecho cerca de 15 mantas hasta ahora.
Él entrega alrededor de 1 o 2 al mes. Nunca se hubiera imaginado estar creando regalos cosiendo, pero lo disfruta muchísimo.
Espera continuar con la iniciativa durante el resto de su carrera. Ha ampliado su conjunto de habilidades para incluir bordados.
Lacie Heitalati, una de las pacientes del Dr. Erik dio a luz a una niña y no tenía idea de que el maravilloso doctor la iba a sorprender con una manta personalizada en su visita de control de dos semanas.
“Es una manta preciosa. Es algo que mi hija atesorará toda su vida. El doctor dedica un tiempo extra de su apretada agenda para hacer esto por sus pacientes. Es un detallazo”, declaró confirmando que eligió al médico adecuado.
Recibir el regalo no solo fue un bello gesto, sino que también ayudó a aliviar el estrés de las visitas al hospital.
Las pacientes están súper agradecidas por un regalo realmente único y de gran valor sentimental.
Te invitamos a compartir esta historia que no solo abriga a los bebés sino los corazones de todos.