En la siguiente fase eliminatoria volvieron a agregar a siete concursantes y para la siguiente, el organizador decidió que, en lugar de elegir a cinco finalistas, como estaba establecido, fueran seleccionadas once aspirantes.
La aspirante que se llevó la corona fue precisamente la representante de República Checa, Karolína Kokesová, quien no habría clasificado según el veredicto del jurado, pero avanzó a la siguiente etapa gracias a la decisión del presidente.
Jesenia Orozco rompió todo el protocolo y protestó frente a las cámaras sobre el escenario.
A pesar de que el presentador no le entregó el micrófono ella empleó su voz para gritar y denunciar lo ocurrido.
“¡Es un fraude, es un fraude!”, gritó la aspirante.
“Hay una corrupción inmensa en México y no es justo, no es correcto lo que están haciendo aquí. Es una falta de respeto para todas las mujeres que están aquí. Tienen que ser justos… es inaceptable la corrupción, es inaceptable la falta de respeto, la falta de dignidad y no lo acepto”, dijo la joven.
“Vine a México, primera vez que he estado en México. Me parece una gente linda, una gente hermosa y nos hacen quedar mal a nosotros mismos como latinos”, dijo la representante de Colombia.
Las demás concursantes empezaron a aplaudir su discurso, una de ellas se le acercó para intentar calmarla.
Después del incidente, la modelo se pronunció al respecto en su perfil de Instagram.
Escribió en sus stories:
“Qué gran desastre el que viví en México. No es culpa de la gente, todos fueron muy lindos conmigo. Pero odio las injusticias, la corrupción, la falta de respeto, la falta de ética. Estuve un mes sin mi hija con el objetivo de demostrarle cosas grandes.
Pero lamentablemente no salió como lo había planeado. Todo fue un desastre al final. Qué experiencia tan desagradable”, escribió Jesenia.
La valentía de la modelo fue aplaudida por muchas personas en las redes, se atrevió a romper el silencio ante un fraude que el público merecía saber. Comparte y déjanos saber tu opinión sobre la reacción de Miss Colombia.