Una conmovedora imagen ha dado la vuelta al mundo en medio del dolor y la desolación que ha dejado esta pandemia, culpable ya de 15 millones de infectados y de la muerte de más de 600.000 personas.
Se trata de una simple fotografía de un hombre sentado en lo alto de una ventana, nada que a simple vista llame mucho la atención ni que justifique que se haya hecho tan viral en las redes en las últimas horas.
Una imagen dice más que mil palabras
Pero no ha tardado en trascender la historia que hay detrás y es tan impresionante que ha logrado emocionar a millones de personas en el mundo entero.
Un devastado hijo escaló lo más alto que pudo sólo para poder despedirse de su madre moribunda por COVID-19
El protagonista de la historia es Jihad Al-Suwaiti, un joven palestino de 30 años de edad, de la aldea de Beit Awwa, cerca de Hebrón, al sur de Cisjordania.
La imagen fue capturada en la ventana de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Estatal de Hebrón, donde su madre luchaba por su vida, a consecuencia del virus y que además complicó gravemente la leucemia que padecía.
El joven se encontraba realmente desolado por no poder estar cerca de su mamá enferma debido al aislamiento obligado. Él era el menor de los hijos y le unía un amor indescriptible a su madre, especialmente desde que se quedó huérfano de padre, hace 15 años.
Un hijo agradecido hace lo que sea por amor
Jihad se las ingenió para trepar todas las noches, y aunque sea a través del cristal, poder vivir junto a su madre todo su ingreso hospitalario.
Así fue como noche tras noche fue constatando cómo delante suyo la mujer que le dio la vida, se apagaba lentamente, hasta que lamentablemente el pasado 16 de julio, se durmió para siempre.
Rasmi Suwaiti murió a los 73 años con el consuelo de tener a su hijo del otro lado del cristal
Esta triste historia fue compartida en Twitter por Mohamad Safa, un reconocido diplomático, activista comunitario y representante ante las Naciones Unidas:
«El hijo de una mujer palestina infectada con Covid-19 subió a su habitación del hospital para sentarse y ver a su madre todas las noches hasta que murió», escribió Safa junto a la foto viral de Jihad y un emotivo dibujo en el que se lo ve junto a su madre con alas, como si fuera un ángel protegiéndolo.
Rasmi será su ángel eterno que lo seguirá protegiendo desde el Cielo
«Me senté impotente detrás de la ventana exterior de la sala de cuidados intensivos, observando sus últimos momentos», dijo Jihad a los medios.
Jihad tuvo que tomar esa medida extrema después de que le prohibieran el ingreso a verla, a pesar de que en el mismo hospital le advirtieron de que estaba llegando su final. Poderla despedir desde la ventana fue un consuelo, pero no por eso menos doloroso.
Nada como quedarse huérfano definitivamente, y en esas circunstancias.
El hermano mayor de Jihad reveló que tras la muerte de su madre, Jihad ha permanecido en un estado de constante negación, y buscando culpables por esta injusta desgracia.
Comparte esta conmovedora historia, que aunque dura, nos deja ver lo más bonito de la gratitud de un hijo, pero a la vez, nos permite palpar el dolor de la muerte y la triste separación cuando más quisiéramos estar junto a los que amamos en su último aliento.