Si hablamos de placeres de la vida, indudablemente no podemos dejar por fuera al chocolate, sin importar su presentación. En deliciosas barras, en exquisitos bombones, o bien una taza caliente de un espeso y rico chocolate.
Realmente es todo un verdadero placer poder llevar este rico sabor a la boca. Su magnífico olor activa la imaginación llevando nuestros pensamientos a eventos o lugares agradables.
Sin mencionar la cantidad de propiedades benéficas que tiene esta increíble tentación.
Tristemente hay una situación muy preocupante en relación a la existencia del cacao que puede limitar la producción del chocolate en el mundo.
Expertos han advertido que es posible que el mundo se quede sin este exquisito producto en las próximas tres décadas porque las plantas de cacao están luchando por crecer en climas más cálidos.
Esta planta requiere mantenerse húmeda todo el año y crecer en lugares muy tupidos que apenas permitan el paso de los rayos solares para que no se dañe el preciado cacao.
Por esta razón, en países de Sudamérica se cosechan los mejores cacaos del mundo, pero de no cuidar el planeta, dejaríamos de consumir este preciado regalo que nos da la madre naturaleza.
Según los científicos, la amenaza del incremento de las temperaturas en los próximos treinta años significa una pérdida de humedad en el suelo que no será compensada por la lluvia.
Los agricultores de los países que producen más de la mitad del chocolate en el mundo, ahora se encuentran ante la difícil encrucijada para decidir si trasladar las áreas de producción de cacao hacia un terreno montañoso que se preserva cuidadosamente para la vida silvestre.
Sin embargo, hacer este movimiento de gran escala representa una seria amenaza para la subsistencia de los ecosistemas ya agonizantes.
Los agricultores temen que el traslado de estas plantas a otros lugares no típicos altere el sabor del cacao y hasta afectar su comercialización en países europeos, donde está el mayor consumo de chocolate en el mundo.
A pesar del aumento de la demanda, la oferta no se ha mantenido, lo que se traduce en una reducción considerable en la existencia de cacao.
Indudablemente el efecto del cambio climático ha acabado con grandes extensiones de cultivos de cacao alrededor de todo el mundo, y cada vez son más las diferentes empresas que comercializan esta fruta después de descubrir la cantidad de beneficios que tiene a nivel cosmetológicos y dermatológicos.
A nivel médico se ha descubierto que el chocolate es un antidepresivo que ayuda mejorar el estado anímico de las personas.
Doug Hawkins, de la firma de investigación Hardman Agribusiness, con sede en Londres, expresó que la producción de cacao está bajo presión debido a que se siguen usando métodos tradicionales de cultivo que no han cambiado durante cientos de años.
También comentó que se estima que los pequeños agricultores no han querido apostar a la alteración genética del cacao para no modificar su sabor y calidad.
Sin embargo, sería un tema que hay que tratar muy seriamente, ya que, de continuar el crecimiento de la población y su demanda en los mercados internacionales, ocasionaría un colapso en la demanda de esta deliciosa fruta.
Tan alarmante es la situación del cacao que todos los indicadores muestran que durante la próxima década se podría estar viendo un déficit de chocolate de 100.000 toneladas por año.
Algunos informes indican que, de los productores de cacao en el mundo, Costa de Marfil es el principal productor y para cumplir con la demanda han tenido que recurrir a la agricultura ilegal de bosques protegidos.
Es momento de reflexionar, más allá del daño que estamos generando a la capa de ozono, también se está afectando la producción de alimentos a nivel mundial. En tan solo diez años pudiéramos dejar de comer algunas frutas o verduras.
Comparte esta importante información sobre el claro mensaje sobre la situación de las plantas de cacao, al que debemos prestar mucha atención, si no cambiamos nuestra manera de vivir, nos vamos a quedar sin un rico manjar.