Delanie Shelton es una madre de familia que se sintió profundamente indignada cuando la escuela Rejoice Christian tomó la decisión de expulsar a su hija. Chloe tiene 8 años de edad y asistía al segundo grado en una escuela Cristiana de Owasso, Oklahoma.
Siempre ha sido una niña responsable y feliz. Nunca antes había tenido un problema en la escuela pero fue expulsada a raíz de un comentario que la dirección juzgó como imperdonable.
Durante un recreo, Chloe estaba jugando con una compañerita y le confesó que le agradaba. La otra chica, cuyo nombre no se ha revelado; acudió de inmediato a los profesores para revelarles lo que estaba sucediendo y Chloe fue castigada.
El recreo de la pequeña fue completamente interrumpido y la llevaron a la dirección sin que ella comprendiese realmente qué había hecho mal. Cuando Delanie llegó a la escuela a buscar a su hija, quedó en shock.
“La subdirectora me preguntó cómo me sentía con el hecho de que las chicas tuviesen sentimientos por las chicas. Yo dije que no veía en ningún problema con eso”, explicó Delanie.
Chloe fue suspendida y le dijeron que no debía volver a la escuela hasta el viernes. Sin embargo, cuando la dirección del lugar comprendió que Delanie no estaba de acuerdo con las medidas que habían tomado, decidieron expulsarla definitivamente.
“Fue muy injusto. Me sentí indignada, traicionada y demasiado triste. Fueron demasiadas emociones y simplemente no lo podía creer”, dijo Delanie.
A través de una llamada telefónica les dijeron que querían romper lazos con toda la familia Shelton y se negaron a discutir el asunto con mayor profundidad. Delanie decidió alzar la voz contra lo sucedido y acudió a los medios para hablar sobre el injusto castigo que su hija había recibido.
“¡Qué bueno que se irá de esa escuela! Los niños merecen amor y comprensión, no un lugar lleno de odio”, comentó un usuario en las redes.
Desde entonces, la escuela ha recibido un sinfín de críticas pero se niegan a dar declaraciones por motivos de privacidad. Las normas de Rejoice Christian alegan que cualquier forma de inmoralidad está completamente prohibida, incluyendo profesar sentir atracción por alguien del mismo género.
“Las niñas no tenían una relación, no hicieron nada. Ella solo dijo que le agradaba, que le gustaba. A los 8 años eso puede simplemente significar que les gusta pasar la hora del recreo juntas”, dijo Delanie.
El caso de la pequeña Chloe ha despertado un enorme debate en las redes. Ser expulsada repentinamente y sentirse tan juzgada ha hecho que la niña se sienta terriblemente confundida.
Miles de personas han decidido enviarle su apoyo a la familia Shelton. Otros aseguran que si la familia no estaba de acuerdo con los valores cristianos simplemente debían llevarla a otra escuela.
Esperamos que Chloe reciba todo el apoyo que necesita. No te vayas sin compartir esta noticia y contarnos tu opinión.