La boda del príncipe Harry, hijo menor de la recordada Diana de Gales se celebró esta mañana en la Capilla de San Jorge ante cientos de invitados y miles de personas que se congregaron en Windsor para celebrar el importante acontecimiento.
Harry y Meghan rindieron tributo a Lady Di en la ceremonia con detalles que honraron la memoria de la fallecida princesa de corazones, sus flores favoritas fueron las protagonistas de la celebración.
Estuvo presente en el anillo de compromiso que recibió Meghan en noviembre del año pasado y que usó durante la boda.
La pareja invitó a la familia Spencer a la boda, los hermanos de la princesa Diana, sus dos hermanas y sus hijos asistieron al evento. Lady Kitty Spencer lució un vestido color verde bosque de la firma Dolce & Gabbana que se robó todas las miradas y la calificaron como una de las mejores vestidas de la boda real.
La modelo de 27 años ha estado en importantes pasarelas, por eso no es una sorpresa que haya tenido un look tan acertado en la boda de su primo.
Lady Kitty fue acompañada por su hermana Eliza, su hermano Louis y su madre Victoria, los miembros de la familia Spencer llegaron juntos a la celebración de la boda en Windsor.
El vestido de Lady Kitty combinaba con de su madre que tenía un conjunto verde lima a juego con un sombrero de fieltro.
Los padres de Kitty Charles Spencer, de 53 años y su madrastra Karen, tercera esposa del hermano de Diana de Gales también asistieron a la boda.
Las hermanas mayores de la princesa Diana de Gales también asistieron, Lady Sarah McCorquodale de 63 años y Lady Jane Fellowes, de 61, junto a sus hijos.
El príncipe Harry se mostró complacido de contar con la presencia de su familia materna en un día tan importante para él.
Se presume que sus primos, incluyendo a Laura Fellowes, la madrina de la princesa Charlotte, tienen un pase de honor a la celebración íntima que se llevará a cabo esta noche con 200 invitados en Frogmore House.
En la ceremonia hubo un gesto que conmovió a todos y fue cuando la hermana de Diana de Gales fue la encargada de la lectura de la celebración, “Muchas aguas no pueden apagar el amor, ni las inundaciones lo pueden ahogar”, era parte del pasaje que leyó.
El texto era un tributo a Diana, que falleció en un trágico accidente en Paris en 1997 cuando Harry tenía 12 años, era en Cantar de los Cantares y hablaba sobre el poder del amor eterno. También interpretaron el himno que se tocó en el funeral de Lady Di, “Guide Me”.
La princesa Diana de Gales jamás será olvidada y en este día tan especial estuvo presente sonriendo desde el cielo por la unión de su hijo menor. Compártelo.