Roxana Alviz perdió el aliento cuando a las 6 de la tarde del pasado viernes, le advirtieron de la desaparición de su bebé de 5 meses, nada menos que de su propio domicilio, cuando la dejó al cuidado de su niñera mientras ella y su marido estaban fuera de casa.
Los hechos sucedieron en el domicilio de los padres en Pampa de la Isla,en la zona residencial de Palma Verde, Virgen de Cotoca y décimo anillo, en el departamento de Santa Cruz, en Bolivia.
Ambos padres debían salir a trabajar y por ese motivo, Roxana había contratado los servicios de Kareliz Macías Laime, de 18 años de edad, a través de una agencia de empleos, 3 días antes de que sustrayera a la pequeña de su hogar.
Las cámaras de seguridad registraron el momento en que sin avisar a nadie, Kareliz salió con la bebé en brazos. En vista de que nunca regresó, la madre alertó de su angustia en las redes sociales y denunció los hechos ante la Policía.
La insólita desaparición de la pequeña Camila Parra Alviz rápidamente se volvió viral en las redes sociales
La Policía inició inmediatamente un operativo de búsqueda al sospechar de que la niñera no actuaría sola. Y después de que las imágenes de la mujer se difundieran ampliamente en las redes sociales, una llamada de una vecina en Cotoca, permitió finalmente la aprehensión de Kareliz Macías.
Habría sido la hija de la propietaria de una tienda la que reconoció a la mujer cuando ingresó al local para cargar su teléfono y le dijo a su madre:
“¿Mamá, esa no es la mujer que está siendo buscada porque se llevó a una bebé que estaba cuidando?”
Kareliz Macías
“Cierren las puertas y llamen a la Policía”, fue la respuesta de la dueña del negocio al percatarse que la alerta de su hija era cierta, ya que le mostró la fotografía que había sido viralizada en las redes sociales, después de que la Policía confirmara que se trataba de un posible caso de trata y tráfico de personas.
Fue así como finalmente, Napoleón Espejos Candía, Jefe de la División de Trata y Tráfico de Personas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), informó que tuvieron conocimiento de la ubicación de Kareliz. Inmediatamente, se acercaron con la Policía y la madre, para detener a la sospechosa y recuperar a la bebé.
Afortunadamente, la pequeña Camila estaba sana y salva, sin signos de violencia.
Cuando Kareliz fue interrogada, aseguró que al salir de la casa se perdió y no supo cómo regresar, versión que resultó poco creíble para la Policía puesto que llevaba consigo una bolsa con ropita de bebé. Además, un día antes la niñera había salido de la casa donde cuidaba a la bebé y retornó sin inconvenientes.
“Nosotros no creemos en lo que dice la niñera, ella salió del domicilio en horas de la tarde hacia el mercado Los Pozos, donde compró algunas cosas para la infante y eso nos hace suponer que estaría mintiendo”, dijeron las autoridades.
La Policía asegura que su conducta tiene que ver con un delito de trata de personas, ya que según los videos de las cámaras de seguridad, el comportamiento no es el propio de una niñera que debe cuidar una bebé.
La justicia trata de entender por qué la niñera no avisó de su salida a los padres de la bebé y por qué no respondió a las 7 llamadas a su teléfono móvil que hicieron los padres.
Roxana Alviz, por su parte, agradeció que su caso se haya viralizado en las redes y que la llamada de la vecina haya sido decisiva para detener a la mujer. También agradeció el impresionante operativo policial en conjunto con el FELCC para lograr la aprehensión de Kareliz. Ahora sólo espera que se haga justicia y que pague con cárcel para que ninguna otra madre tenga que pasar por esa angustia.
Mientras que la La División de Trata y Tráfico recomienda a la población denunciar sobre la ruptura de la rutina de algún familiar de manera inmediata, las 24 horas posteriores a su desaparición son críticas, ya que en este tiempo se puede definir si aparecerá o no.