Lamentablemente muchas personas mayores sufren las consecuencias de la soledad cuando han perdido a sus seres queridos, o en algunos, cuando sus familiares no los visitan. Algunos están recluidos en centros de cuidado y otros en casa.
Es importante reconocer con gratitud la labor que ellos han realizado durante sus años de juventud y tener la comprensión necesaria para ser solidarios. Los mayores son seres humanos llenos de sabiduría que necesitan apoyo para realizar sus tareas diarias como si fueran niños de nuevo porque el paso de los años desmejora sus habilidades físicas y su salud.
La historia de Óscar ha conmocionado las redes sociales, y nos invita a reflexionar sobre la importante de esos pequeños gestos que valen mucho y hacen una gran diferencia en la vida de los demás.
Él tiene 84 años, es de Argentina, estuvo casado, pero su esposa perdió la vida hace cuatro años, no tuvieron ningún hijo. Sus hermanos lamentablemente fallecieron también.
Era el día de su cumpleaños, así que Óscar pensó en una solución que pudiera ofrecerle la compañía que tanto anhelaba en ese día tan especial.
Así que se dirigió a la emergencia de un centro hospitalario cercano a su casa fingiendo que tenía un fuerte dolor de cabeza, conocido en términos médicos como cefalea.
Pero las enfermeras rápidamente descubrieron que todo se trataba de una mentira, ya que pudieron comprobar que no padecía dicha afección.
Y cuando supieron el verdadero motivo de la presencia del anciano en el hospital no lo podían creer, su dolencia no era por la cefalea, era porque no quería estar solo durante su cumpleaños y quería celebrar la vida.
Cuando las enfermeras escucharon su testimonio, no dudaron en improvisar una fiesta para Óscar, le compraron una pequeña tarta y velas, con los guantes quirúrgicos hicieron globos.
Todo estaba listo para la celebración de este paciente tan especial.
Gisel Rach, una de las enfermeras, publicó en su perfil de Facebook la anécdota que nunca olvidará.
Ella compartió una fotografía y así relató la historia:
“El rostro de este hombre y sus ojos llenos de lágrimas de tanta emoción por algo tan simple como esto no lo olvidaré nunca más”.
Es que es muy difícil borrar de la memoria el recuerdo de un gesto tan conmovedor, el frío espacio del hospital se convirtió por un momento en un cálido hogar donde el protagonista era Óscar.
Ojalá que esta solidaridad se propague en todo el mundo y que cada uno tome la iniciativa de hacer feliz y ofrecer su compañía a una persona mayor. También desea tener un cumpleaños igual el año que viene.
Esto es lo que decía la publicación:
“Anoche este hombre acudió a la guardia por una ‘cefalea’ pero ¿saben cuál era su verdadera dolencia? Hoy cumple 84 años y no quería estar solo. Sí, así como lo leen. Seguro se te cerró el pecho igual que a mí y a mis compañeros.
No tuvo hijos y su esposa perdió la vida, sus hermanos fallecieron, él era el menor.
Decidimos comprarle una mini tarta, una vela, para que pidiera tres deseos y como ven improvisamos globos inflando guantes.
Si tienes a alguien que te espera, a alguien que te llama, que se preocupa por ti, te valora y te ama, cuídalo, porque eres millonario y no te estás dando cuenta.
¡Feliz Cumpleaños, Óscar!”
Comparte esta emotiva historia con tus seres queridos y no esperemos más para comenzar a tener gestos de cariño y admiración para nuestros mayores.