Un padre es capaz de dar su propia vida por salvar a uno de sus hijos y literalmente esto es lo que hizo un padre de Tennesee que falleció a mediados del pasado mes. Frederick Pepperman, de 53 años, perdió la vida el 14 de julio mientras luchaba por salvar a sus hijas de las turbulentas aguas del Seacrest en Florida.
Esta es una historia lamentable de cómo las vacaciones familiares se convirtieron en una verdadera tragedia.
Los Pepperman se encontraban en la playa disfrutando de un día soleado, cuando la hija menor Grace, de 16 años, fue arrastrada por una ola.
Ante la situación, sus hermanas Olivias, de 20 años, y Kathryn, de 24, entraron al mar para rescatarla pero ellas también fueron atrapadas por las olas.
Según recordó la madre Julie Pepperman, su esposo Frederick entró al agua para socorrer a sus hijas.
El hombre utilizó todas sus fuerzas para luchar contra la corriente y llevar a sus hijas hasta la orilla, otro familiar entró al agua para ayudar y con una tabla lograron sacar a las chicas del mar.
Cuando todo parecía terminar el hombre cayó inconsciente y tuvo que ser llevado de vuelta a la orilla por un grupo de transeúntes. Frederick recibió reanimación cardiopulmonar y fue trasladado a un hospital local, en el cual fue dado por muerto.
Este hombre se comportó como todo un padre, un verdadero héroe. Su hija Kathryn recuerda con mucho dolor ese momento y tiene marcada en su memoria las últimas palabras que escuchó decir de su amoroso progenitor.
“Kathryn dijo: ‘Papi, ayúdame’, y él dijo: ‘Te atrapé’. Esas fueron las últimas palabras que le dijo», comentó Colette James, cuñada de Fred.
Según se pudo conocer, el mar estuvo muy agitado ese día pues el accidente ocurrió el mismo fin de semana que la tormenta tropical Barry llegó a la costa estadounidense.
Los bomberos de South Walton habían puesto banderas rojas en la playa como advertencia del posible peligro. Tristemente, la familia era ajena a esta localidad y no estaba familiarizada con las señalizaciones.
De haber podido reconocer esta indicación, quizás la tragedia se hubiese evitado.
Lamentablemente ya es tarde para pensar en eso, este hombre dio su vida para salvar la de sus hijas.
«Sin él allí, tres de los míos definitivamente se habrían ido. No parece real. Sólo quiero que la gente sepa que él hizo lo que muchos padres dicen que harían, fue un padre extraordinario. Murió por el mayor propósito en la vida: sus hijas», dijo Julie.
Esta ha sido una verdadera tragedia para la familia. Fred era un padre amoroso y un esposo inigualable. Su familia intenta recuperarse de la terrible pérdida y quisieran recordarlo como el buen hombre y padre entregado que fue hasta el último momento de su vida.
Comparte esta nota y advierte a otras personas sobre este tipo de señalizaciones. No dejemos que este tipo de tragedias se repitan. Nuestras oraciones y solidaridad con la familia.