Al escuchar el nombre de Lucifer, la mayoría de nosotros pensamos en la conocida imagen del diablo o ángel caído que aparece en tantos mitos y leyendas. Sin embargo, hay una pareja que estaba convencida de que ese era el nombre perfecto para su bebé.
La pareja vive en la ciudad de Derby en el Reino Unido.
La mujer encargada de hacer el procedimiento en el registro quedó en shock y decidió tomarse un tiempo para averiguar si realmente era legal permitir que un niño tuviese ese nombre.
Dan y Mandy Sheldon habían elegido el nombre desde las primeras etapas del embarazo y mantenían una postura firmeen su decisión.
Dan tiene 37 años y su esposa 32.
Sin embargo, no habían podido realizar los trámites porque los registros estaban cerrados durante la cuarentena. En cuanto supieron que habían reanudado sus actividades, se dirigieron allí para registrar el nacimiento de su niño. No imaginaron que se encontrarían con una serie de dificultades.
“Quedamos impactados con la forma en la que reaccionaron. Simplemente pensamos que era un lindo nombre. Único”, dijo Dan.
Lo primero que hizo la empleada del registro fue pedirles unos minutos. Revisó una serie de leyes para asegurarse si realmente esto era posible de hacer.
Al parecer, en lugares como Nueva Zelanda y Alemania lo han prohibido por completo y las parejas terminan eligiendo algún otro nombre como Luciano, sin embargo, no había nada que les impidiera a estos padres realizar eso.
“Traté de explicarle que es una referencia al griego donde la palabra significa ‘luz brillante’ o ‘mañana’”, aseguró Dan.
La mujer estaba decidida a oponerse. Cuando agotó los recursos legales intentó hablar con los padres para decirles que ese nombre podría causar una serie de dificultades en la vida del niño. Ellos aseguraron una y otra vez que lo hacían sin ninguna connotación religiosa.
“Nos disculpamos si alguien se ofendió pero es nuestro trabajo aconsejar a los padres en estas situaciones. Hay muchos que no están conscientes de que los nombres vienen con ciertas asociaciones y significados”, dijo un portavoz del Registro de Derbyshire.
La empleada del registro se negó por completo a continuar con el procedimiento así que los padres levantaron una queja para reportar lo sucedido. Finalmente, la mujer tuvo que acceder a continuar con su trabajo y procedió a llamar al niño Lucifer.
El asunto se volvió muy comentado en las redes y los padres continuaron alzando la voz en contra del trato que recibieron.
“Nos dijo que jamás conseguiría trabajo. Que las maestras en la escuela no querrían acercarse a él”, se quejó Dan sobre la mujer en el registro.
No hay dudas de que todos los padres tienen derecho a escoger el nombre que les parezca más apropiado para su bebé. Sin embargo, es algo comprensible que los empleados del registro tuviesen sus dudas y trataran de ayudar al pequeño para asegurarle un futuro más sencillo.
¿Qué opinas de la selección de este peculiar nombre? No dudes en compartir esta noticia que ha dado tanto de qué hablar.