Honza Šimša, de 26 años, de la República Checa, es un experto en tecnología que lleva rellenos cosméticos con un valor aproximado de 20.000 dólares para cumplir su sueño de parecerse a Barbie.
Honza recibió la primera inyección de relleno en su rostro en 2017. Ahora se inyecta en la cara mensualmente, tiene 20 lotes de relleno en los labios, y en total unos 90 ml de relleno.
Honza se identifica como un hombre, se viste para el trabajo de una manera ‘masculina’ y se siente atraído sexualmente por las mujeres.
Sin embargo, en su tiempo libre prefiere adoptar una apariencia femenina, acentuada por enormes pestañas postizas, tacones altos y pelucas muy coloridas.
«Me atraen las mujeres, pero algunas chicas tienen un problema con mi apariencia, ya que puede ser confuso para ellas», dijo Honza.
Toda esta nueva imagen le ha demostrado que no ha sido de gran ayuda para su vida amorosa.
Después de haber admirar a la modelo de glamour Candy Charms, finalmente su preferencia se inclinó hacia la apariencia de muñeca Barbie.
«Me gusta que las chicas con las que salgo tengan el mismo aspecto que yo, el de muñeca Barbie. Aún me gusta cómo me veía masculino, pero me siento más feliz así, y me gustaría tener más cirugías», afirmó Honza.
Un amigo acreditado para administrar inyecciones de relleno ha sido el responsable de algunas de sus cirugías cosméticas de forma gratuita. Honza estima que, de lo contrario, habría pagado más de 20.000 dólares.
Uno de sus procedimientos más costosos ha incluido un viaje a Eslovaquia para la operación de estiramiento de labios de 3.200 dólares.
“Me tomó un tiempo encontrar al cirujano correcto. Hablé con varios y muchos pensaron que lo que yo quería era imposible. La recuperación fue dura, pero estaba realmente satisfecho con los resultados”, dijo Honza.
Para él algunas personas todavía tienen actitudes muy anticuadas, y aunque recibe mucha atención por sus labios grandes, maquillaje y su apariencia en general, no siempre resultan comentarios positivos.
«Sé que mi apariencia es extrema y de hecho he tenido problemas en mis trabajos pasados por eso. Ahora, cuando voy a trabajar uso ropa masculina y sin maquillaje».
Sin embargo, Honza ha ganado mucha popularidad en las redes sociales tras promocionar su look, y afirma que todavía no ha terminado con los cambios.
“Quiero una nariz nueva y también quiero implantes en el trasero para que mi cuerpo se vea más en forma de S, casi como si hubiera sido PhotoShopped”, agregó Honza.
Honza trata de ignorar a las personas que lo juzgan sin antes conocerlo como persona.
«Sí, soy un tipo que se parece a Barbie, pero eso no significa que la gente deba ser desagradable. Ser diferente debe ser celebrado, no juzgado«, dijo Honza.
Lo cierto es que cada persona es libre de hacer lo que quiere, sin afectar los derechos de los demás. Comparte la historia de Honza y déjanos saber tu opinión.