Un gatita al borde de la muerte logra salir adelante gracias al amor de una mujer que decidió actuar y no pasar indiferente ante su situación.
Es bien sabido que son muchos los peluditos que crecen en hogares donde son amados y respetados, pero también hay muchos otros que día a día deben tolerar las duras condiciones de vivir en la calle, expuestos a los cambios climáticos y lo que es peor a la apatía de la gente.
Gatita logra increíble transformación gracias al amor de una mujer.
Por fortuna, siempre hay quienes estas dispuestos hacer la diferencia y brindar segundas oportunidades a los peluditos vulnerables, esto fue lo que pasó a nuestra gatita protagonista.
Nur Hamizah es una mujer amante de los animales que vive en Malasia, hace poco más de un año rescató a quien actualmente es su amada mascota.
La carita de la gatita era la parte más lastimada.
Su día transcurría como cualquier otro cuando de repente vio que debajo de su auto había una gatita notablemente lastimada, su cuerpecito estaba cubierto de grandes llagas, tenía poco pelaje, la cola y carita estaban muy lesionadas.
La gatita estaba muy débil y completamente desorientada.
La pequeña gatita estaba al borde de la muerte, parecía un bulto de piel y huesos. Difícilmente hubiera logrado sobrevivir sola en la calle, por fortuna, Nur se conmovió ante su situación y dio un giro al fatal destino que le esperaba.
La noble mujer lejos de correrla de su propiedad se acercó lentamente para brindarle ayuda. Al respecto comentó:
“Se veía muy mal, con su mirada me rogaba que la ayudara. Me conmovió tanto la primera vez que la vi. Me dije a mí misma: “Si puede sobrevivir, la cuidaré y la amaré tanto como pueda”.
La condición en la que se encontraba la gatita era crítica, necesitaba atención médica veterinaria y observación constante.
Su cuerpo lucía agotado, pero con su mirada suplicaba ayuda, sus ojos brillantes le trasmitieron a Nur una fuerza increíble.
Una valiente gatita que no se dio por vencida.
La mujer no estaba dispuesta a dejarla sola, así que buscó una caja para trasladarla hasta el centro clínico.
Increíblemente, cuando puso la caja frente a la gatita, ella misma se movió y se dejó caer sobre la caja. Sabía que estaba en buenas manos y con la poca fuerza que tenía lucharía por su vida.
Nur decidió bautizar a la gatita como Meimei.
En la clínica la revisaron, le diagnosticaron una grave infección en la piel por lo que fue necesario cumplirle un tratamiento de antibióticos y baños medicinales.
Tan solo pesaba 1 kilo 800 gramos así que le dieron una dieta a base de proteínas para ayudarla a aumentar de peso paulatinamente, le quitaron el poco pelaje que tenía enmarañado y curaron sus heridas.
Meimei necesitó de un tratamiento especial pero logró salir adelante.
Debido a su condición era necesario que la gatita recibiera cuidados especiales, por lo que Nur aprendió a realizarle algunas curas, con mucha paciencia, dedicación pero sobre todo amor, logró que la gatita saliera adelante.
Fueron cinco meses de tratamiento, pero finalmente, la dulce Meimei reveló grandes cambios, su pelaje estaba creciendo, lucia sana y fuerte.
Atrás había quedado esa gatita moribunda, poco a poco fue saliendo de su caparazón, a los meses de su rescate se había transformado es una esponjosa y dulce bola de pelos.
Hoy día es una hermosa minina que disfruta de un verdadero hogar y del amor incondicional de su familia, ama hacer travesuras y acurrucarse cerca de sus personas favoritas.
“Le gusta comer, le gusta dormir, le gusta jugar en mi casa. Pero si ve a alguien que no conoce, correrá y se esconderá”, dijo Nur.
A esta hermosa gatita aun le cuesta compartir con gente que no conoce, pero es muy cariñosa con todos sus seres queridos.
Este ha sido un proceso un poco más lento pero ha logrado un cambió increíble tomando en cuenta la condición en la que se encontraba cuando fue rescatada.
Meimei ha logrado el final feliz que se merece gracias al amor incondicional de una mujer que desde el primer día vio su belleza interior. Ojalá más personas se motiven a ser puentes de luz y amor en las vida de los peluditos más vulnerables.