El pasado lunes, un usuario publicó en las redes un vídeo en el que aparece lamiendo un recipiente de helado de la marca Blue Bell antes de volver a colocarlo en la nevera del supermercado.
El hecho sucedió en una tienda Walmart el sur de Texas, no es la primera vez que alguien prueba este producto para contaminarlo intencionalmente y que sea vendido a otro consumidor.
Recientemente, se hizo viral el caso de una joven que probó un helado y lo devolvió a la nevera. Gracias a la grabación logró ser identificada y podría pasar años tras las rejas como consecuencia del acto que cometió.
La policía de Port Arthur también se enfrentó al protagonista de este nuevo vídeo identificado como “Dapper Don”, y este se defendió enseñándoles una factura de la compra del producto.
Alegó que no había cometido un acto inapropiado porque adquirió el envase del helado que probó. Sin embargo, no hay manera de comprobar que se trate del mismo producto.
Happy national soft ice cream day lmao ?#viral
Publiée par Dapper Don sur Lundi 19 août 2019
Así que, ante la duda, la tienda decidió desechar todos los helados que estaban en la nevera para prevenir incidentes.
El vídeo del joven lamiendo el helado dura apenas 20 segundos, está titulado como “Feliz Día Nacional del Helado Suave”, en las escenas aparece el protagonista sacando el envase de helado de vainilla, lamiéndolo y colocando la tapa para devolverlo a la nevera.
En el fondo se puede escuchar a un amigo del joven animándolo mientras grita: “¡Vamos, vamos! ¡Date prisa!”.
De acuerdo con las declaraciones del detective Mike Hebert, del Departamento de Policía de Port Arthur, recibieron una serie de denuncias del incidente en su página de Facebook.
Muchos usuarios indignados al ver el vídeo les escribieron para pedirles que tomaran medidas contra el autor. Tres horas después de la publicación del vídeo, los agentes de policía lo interceptaron en su casa.
Hasta el momento no se han presentado cargos contra el joven que lamió el helado. La policía está investigando el caso en conjunto con el fiscal del distrito.
En caso de que sea acusado por manipular un producto de consumo podría ser condenado hasta 20 años de prisión.
Walmart se pronunció al respecto: “Si se manipulan los alimentos, o un cliente quiere dejar la impresión de que dejó un producto adulterado, nos moveremos rápidamente alertando a la policía para identificar, aprehender y enjuiciar a quienes creen que eso es una broma, porque no lo es”.
Esperamos que no repitan hechos como este que son percibidos por algunos como una divertida situación sin pensar en las graves consecuencias. Compártelo.