Las bodas ficticias son algo que no pueden faltar en algunos festivales que se realizan en todo el mundo, pues para algunas personas resulta muy divertido contraer unas nupcias que no pasan de la mera fantasía.
Pero para un niño dicho acto no fue nada gracioso, pues lloró durante toda la ceremonia, a diferencia de su compañera de clase, quien esbozaba una gran sonrisa de oreja a oreja.
Esto sucedió en Tamaulipas, México, en donde los alumnos de una primaria se reunieron para disfrutar de una divertida kermés, fiesta popular del barrio, en la que además de comida, música y diversión, también había un registro civil para casar a las parejas que se acercaran a él.
No se sabe cómo es que el pequeño niño llegó al registro con su feliz compañera, quien seguramente es la que se aseguró de llevar al niño para alistarse a lo que sólo para ella era una boda de ensueño.
Pero no así para el desdichado futuro marido, quien no cesó de llorar, de lamentarse y de tener la carita más triste del mundo, en verdad la estaba pasando muy mal, y su reacción se hizo viral en redes sociales, pues alguien tomó fotos de todo lo sucedido.
El vídeo se volvió viral con rapidez, hasta ahora la publicación original tiene más de 14 mil comentarios y más de 10 mil reacciones. Además de que ha sido compartido una infinidad de veces y es que parece que la reacción del pequeño es la reacción de muchos hombres cuando se casan en la vida real, de ahí que el vídeo se haya hecho tan popular.
“¿Qué necesidad de hacer que el pobre niño se casara? Casi me rueda una lágrima al recordar mi propia boda”, comentó un divertido usuario de redes.
Y la realidad es que la reacción del pequeño es todavía más notoria e impactante debido a que su futura esposa en realidad estaba radiante y llena de felicidad. Es muy probable que ese día haya sido el mejor de su vida, ya que no paraba de sonreír y de mostrar su felicidad.
“No sé si verlo como si fuera un entrenamiento para no cometer semejante error, luego uno se arrepiente de sus decisiones”, comentó un internauta.
Y aunque para muchas personas todo esto fue muy divertido, otras no comparten dicha opinión y consideran que no debieron someter al pequeño a tan desagradable experiencia para él.
Sin duda, el hecho que enfrentó el pequeño será algo que recordará por siempre, quizá dentro de algunos años le de algo de risa su comportamiento, ojalá no se traume de por vida.
“Si ese niño hubiera sido mi hijo, lo hubiera sacado de ahí de inmediato. La cara de angustia de la criatura no es cosa de risa”, comentó un usuario de redes.
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