Hay cosas que valen la pena y otras que no. Cuando soñamos convertirnos en algo lo justo es que luchemos, que hagamos lo que esté en nuestras manos para hacer nuestros sueños realidad. En el camino siempre hay obstáculos, habrá personas que querrán detenernos o hacernos daño, lo importante es tener constancia y no permitir que ese tipo de comentarios negativos entren en nuestras cabezas, ni que se apoderen de nuestro futuro.
Se sabe que el mundo del modelaje es particularmente difícil para aquellas mujeres que desde muy temprana edad intentan encajar, sobre todo por la cantidad de prejuicios que existen acerca de la figura femenina y los cánones que «hay que seguir al pie de la letra» Es un sector difícil, para demostrarlo solo hace falta mirar el dato arrojado por el International Journal of Eating Disorders: a un 72% de las modelos le han dicho al menos una vez que tiene que bajar de peso urgentemente.
Afortunadamente no todas se han dejado vencer por esos prejuicios, inclusive aquellas mujeres que hoy en día vemos alcanzar la fama en algún momento han sido duramente criticadas de esa forma.
Por ejemplo, cuando Kim Noorda tenía 17 años de edad, medía 1.77m y pesaba 49 kilos, en ese momento su agente le sugirió que perdiera algunos kilos para así poder conseguirle más ofertas de trabajo.
Gisele Bündchen, quien hasta el año 2016 fue la top model brasileña mejor pagada, contó cómo le dijeron que su nariz era muy grande y sus ojos muy pequeños cuando a penas tenía 14 años.
Era tan solo una niña, al tener esa edad y aspirar entrar en el mundo del modelaje ha de ser muy duro escuchar algo así. Por esa razón ella es un ejemplo; ya que no solo no permitió que eso la detuviese, sino que hoy en día incita a las jóvenes a amarse tal como son.
«Hace algunos años, cuando pesaba casi 49 kilos, algunas personas me advirtieron que debía perder peso», declaró Coco Rocha en una presentación del Council of Fashion Designers of America. Cualquiera que haya visto a esta mujer en fotos se asombraría de que alguien sea capaz de sugerirle que pierda peso, es indignante que existan estos prejuicios, son muy dañinos.
Por otro lado, Tyra Banks también ha contado públicamente la forma en la que sus compañeros se burlaban de ella por tener la frente grande; así como Cara Delevigne fue catalogada como «enana y fea» por Marc Jacobs, quien más adelante se disculpó con ella y la convirtió en una de sus musas.
La hermosa Gigi Hadid también tuvo un inicio muy duro, ya que en muchas pasarelas le dijeron que era muy grande y que para triunfar en ese mundo tendría que bajar de peso… Hasta que IMG la fichó y apreció su atlético cuerpo.
Hay muchos ejemplos así, de mujeres hermosas a las que les costó mucho trabajo llegar a donde llegaron. Si ellas hubiesen hecho caso a las críticas, hoy en día no estarían donde están. El mensaje que vale la pena rescatar es que tenemos que luchar por nuestros sueños y entender que lo que digan los demás no puede guiar nuestras vidas.
Te invitamos a compartir este mensaje con todos tus amigos y conocidos.