Seguramente, alguna vez te has topado o sido tú mismo el protagonista de alguna experiencia sobre esas vueltas extrañas que da la vida; pasan cosas que parecen llegar de pronto, como si de un decreto mágico se tratase y te sorprenden.
Como dice la letra de la canción interpretada por Rubén Blades: “la vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida”.
Uno de los ejemplos de optimismo y de las vueltas que da la vida es Eugenia Vizcarra, una instrumentadora quirúrgica quien conmovió a todos con su triunfo en el programa “Bienvenidos a bordo”, presentado por Guido Kazcka actor, productor y conductor de televisión y radio argentino.
Y es que, resulta que Eugenia tuvo que vivir el drama de ver el techo de su hogar derrumbarse y dejar su casa por riesgo a sufrir algún accidente físico. Sin embargo, su posterior presentación en vivo en el programa le valió el premio de 560 mil pesos australes, lo que equivale a unos 7 mil dólares estadounidenses.
Aquel viejo refrán de “no hay mal que por bien no venga” cobró todo su sentido cuando aquella emocionante noche Eugenia brilló con luz propia en las pantallas de televisión en señal abierta.
La participante obtuvo el primer premio en un concurso exclusivopara trabajadores de la salud denominado “La pared de la fortuna”, cuyo desafío consiste en ir adivinando si el número siguiente al que se exhibe en un tablero es mayor o menor.
Precisamente, la también madre de dos pequeñas hijas acudió al estudio a hacer el programa con una gran dificultad que sortear a cuestas, pero con la esperanza intacta de recaudar algunos fondos para recuperar su vivienda, y vaya que lo logró.
“No sé muy bien lo que pasó con el techo, pero evidentemente fue la construcción -contó-. Un día estábamos ahí, y se desplomó. Por suerte, pudimos sacar a nuestras hijas, así que no se lastimó nadie. Ahora nos fuimos a vivir a casa de mi suegra”, dijo Eugenia.
Eugenia fue acertando uno a uno los números que iban apareciendo en la pared. El anteúltimo era el 3. Tuvo que arriesgarse a si el siguiente era menor o mayor. Contra lo que hubiera dicho la mayoría, ella respondió: “Menor”. Y, sí, lo demás es historia.
Con una emoción intensa, en un estallido de alegría, Guido dio por terminado el concurso con una nueva y flamante ganadora quien, presa de la emoción, apenas alcanzó a contestarle con un simple “gracias” petrificado.
“¡Sí, menor! ¡Qué bien, tremendo! ¡Felicitaciones, Eugenia!”, exclamó feliz el presentador Guido Kackza.
Siempre es importante, a pesar de las vicisitudes y adversidades que se nos puedan presentar en la vida, tener para sí y transmitir a los demás una visión optimista de la realidad, poder extraer de una contrariedad algo positivo, y saber que un revés puede tener resultados favorables.
Solo nos resta decir que la vida gira al igual que nuestro planeta. Hay que aprender, como Eugenia, a aceptar su flujo natural, a que todo tiene su tiempo y lo que nos corresponde llegará, pero en su momento, sin angustias y sin estrés.
La reacción de esta madre al ganar el premio emocionó a todos los presentes en el estudio y a miles de personas en las redes, no te vayas sin compartirla.