Un médico del sur de Australia ha realizado una operación histórica en un hombre camboyano, quien mantenía la boca cerrada por un crecimiento enorme que emanaba de sus labios.
Eng Kheng, un residente de una remota aldea en la provincia de Kampong Cham, ha estado viviendo con la extraña condición durante 30 años y nunca había recibido ningún tratamiento dental.
El doctor Andrew Cheng, médico de Adelaida, escuchó sobre el increíble caso de Kheng, a través de una organización benéfica con la que trabaja en Camboya, y quiso ayudar.
Nunca había visto algo así. No creo que nadie en todo el mundo haya visto algo tan grande», dijo el Dr. Cheng.
Kheng fue a una consulta médica originalmente por un problema de cataratas, antes de que los médicos se sorprendieran por el crecimiento de su boca.
Ellos alertaron al Dr. Cheng, quien voló con su mentor al pueblo de Kheng después de que se les envió información médica a los médicos camboyanos.
Los médicos y cirujanos locales organizaron tomografías computarizadas para asegurarse de que no era una neoplasia maligna. «Conseguimos utilizar todas las tomografías computarizadas en las fotos para planear la cirugía en Australia».
El tamaño del crecimiento de sus encías fue el resultado de una rara enfermedad llamada Hiperplasia Gingival. Hay una probabilidad de 1 en 750.000 de ser diagnosticado con la condición, de acuerdo al Dr. Cheng.
El enfermo se vio obligado a adaptar su forma de comer y tragar, siendo capaz sólo de consumir ciertos alimentos. «Por lo general sólo tenía líquidos, arroz cocido, fideos y sopa. Y limonada, le encanta la limonada», dijo el Dr. Cheng.
Él podía tragar, pero la forma en que tragaba era diferente. Se retorcía el cuello y tragaba, al modo como lo hacen los pájaros.
Sus ondas experimentaron un grado de estrechamiento, pero afortunadamente Kheng nunca tuvo problemas respiratorios, a pesar de tratar con la rara condición durante 30 años.
Primero probaron el procedimiento en el hermano del Kheng, que sufría de la misma condición, pero su caso era mucho menos severo. «Primero hicimos la cirugía a su hermano y utilizamos sus primitivos instrumentos quirúrgicos. Hicimos la cirugía y obtuvimos resultados bastante buenos «, dijo Cheng.
Dijeron que era importante para ellos hacer la cirugía en Camboya porque querían «aleccionar a los médicos locales». Pero debido a que el estado de Kheng era tan malo, no pudieron eliminar con seguridad el crecimiento en Camboya, por lo que tuvieron que llevarlo al Hospital Ashford de Adelaida, donde accedieron a ayudar.
Kheng podría haber muerto en Camboya si hubiéramos realizado la cirugía allí. Así que lo trajimos de regreso a Australia «, dijo el Dr. Cheng.
Sus enfermeras regulares donaron su tiempo para ayudar en la operación, y después de que la comunidad camboyana en el sur de Australia se enterara de la cirugía, todos quedaron desconcertados.
La operación fue un éxito completo y Kheng ahora está totalmente irreconocible. Aparte de unas cuantas cicatrices alrededor de su boca, casi no hay evidencia de la cirugía.
Después de la operación fue invitado por los monjes locales a vivir en un monasterio cercano, para que pudiera recuperarse en un entorno más familiar.
«Era como si nunca hubiera salido de su aldea», dijo Cheng.
El paciente ahora puede disfrutar de toda la comida y la limonada que desea sin tener que «comer como un pájaro», pero su principal preocupación era parecer normal.
Ha estado sufriendo toda su vida, sólo quería parecer normal, como todos los demás”.
Un verdadero trabajo en equipo que trajo luz a la vida de este hombre, que por primera vez consiguió su sueño de parecer normal, como los demás. Esperamos que el doctor Cheng pueda seguir obrando esos milagros con sus manos y dar una esperanza a otras personas.
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