Los últimos días han resultado terriblemente devastadores para los países que han sido alcanzados por los huracanes que actualmente se encuentran amenazando este hemisferio del mundo, si bien resulta terrible ver imágenes de cómo miles de personas han perdido sus hogares, sus trabajos e incluso sus vidas, de cierta manera resulta terrible darse cuenta de cómo el huracán Irma ha acabado con lo que eran hoteles extremadamente lujosos, los cuales tras unas horas de exposición al huracán han sido reducidos a ruinas.
Las islas del caribe se consideran como uno de los lugares turísticos más populares del mundo, debido a sus hermosas playas, interesantes lugares históricos y deliciosa gastronomía, por lo mismo, estas islas son reconocidas por sus esplendidos hoteles.
Sin embargo, estas islas han sido fuertemente golpeadas por el huracán Irma, lo que causó que tan solo tras un par de horas, los hermosos hoteles se vieran fuertemente afectados por las fuertes lluvias y devastadores vientos.
Afortunadamente, la infraestructura de la mayoría de los hoteles se mantuvo, pero toda la indumentaria interna, desde las camas en las habitaciones hasta los equipos de la cocina quedaron totalmente inútiles.
Es necesario tomar en consideración que lo más probable es que muy pocas personas se encontraran presentes durante la llegada de Irma a los hoteles; sin embargo, gracias a las redes sociales es posible experimentar lo que estas personas vivieron de primera mano gracias a los posts que ellos mismos realizaron en Instagram y Facebook.
Las imágenes de la destrucción causada por Irma siguen apareciendo mientras esta pasa por Anguilla, Barbuda, Saint-Barthelemy, St Martin y las islas vírgenes británicas, sin mencionar también Puerto Rico y las islas vírgenes de los estados unidos, llegando a poner al menos a 49 millones de personas en peligro de que el huracán pase cerca a sus lugares de residencia con diferentes niveles de destrucción.
Daily Mail
Enviamos nuestras oraciones para todas aquellas personas que fueron víctimas de estos terribles desastres naturales o que ya han pasado por la espantosa experiencia en el pasado, un destino que no se le desea ni al peor enemigo.
De cierta manera, estos eventos lo llevan a uno a reflexionar sobre lo pequeño que realmente somos en comparación a los caprichos de la madre naturaleza y cómo nuestras acciones han podido causar tanta devastación; a fin de cuentas, lo importante es estar preparados y esperar lo mejor no solo personalmente sino para las millones de personas que se encuentran en desgracia.
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