Esta pareja adoptó a 15 perritos que necesitaban hogar demostrando su espíritu noble y su compromiso con velar por el bienestar de estos seres tan vulnerables y agradecidos.
Adoptar un perro es, sin duda, un acto de amor que le devuelve la dignidad a quien un día tuvo la desdicha de ser dejado a su suerte.
Mantas y Rasa, una pareja de origen lituano, decidió cambiar de residencia y se mudaron a la isla tailandesa de Koh Kood, con tal de compartir su vida con nada menos que 15 animalitos en situación de calle que tuvieron el buen tino de adoptar.
Manta y Rasa son una pareja que ha extendido su amor hacía los perritos sin hogar de la isla
Tal como el perro es el mejor amigo del hombre, ellos, un dúo sensacional, se han convertido en los mejores amigos de todos los perros y demás animales sin hogar quienes viven en el atolón asiático.
Ambos acordaron mudarse hace seis años. Cuando llegaron a la isla, no solo se enamoraron de sus bellos y apacibles parajes y de la amabilidad de los lugareños, sino también de sus caninos.
En vista de que ya no hay médicos veterinarios en la zona, Mantas y Rasa se han dedicado con amor a los peludos. De hecho, además de cuidarlos y protegerlos, viajan una distancia de 40 kilómetros para alimentar a otros perros desolados.
Además, también les proporcionan medicamentos y les hacen chequeos médicos.
La tierna y conmovedora historia del matrimonio lituano comenzó cuando Mantas y Rasa dejaron atrás su país báltico natal para viajar por Tailandia. Sin embargo, jamás imaginaron que les gustaría tanto este paradisíaco lugar.
Mientras se encontraban en pleno trayecto, Mantas y Rasa tuvieron la mala fortuna de perder a su amado Aibo, un hermoso ejemplar de raza Boxer, de 10 años, quien para el momento de su deceso se encontraba en Lituania.
Ambos quedaron devastados con la noticia. Sin embargo, transformaron toda esa tristeza en solidaridad, amor y entrega hacia los seres más desposeídos, quienes más sufren, los eternos olvidados.
“Se puso muy enfermo y fue imposible salvarlo. Fue un momento muy difícil para nosotros, no pudimos estar con él, todo lo que pudimos hacer fue decirle que lo amamos por teléfono. Estábamos muy destrozados”, dijo Rasa en su momento.
Fue entonces cuando el duelo profundo que enfrentaron impulsó aún más a la pareja de esposos a buscar otros derroteros y se quedaron en Koh Kood de manera permanente.
Primero adoptaron a un cachorro local, sin embargo, se dieron cuenta de que eran muchos quienes se encontraban en la misma situaciónde calle, deambulando sin rumbo fijo por la isla. Comprendieron el problema de los perros sin hogar cuando se quedaron a vivir allí y actuaron en consecuencia.
Además, no solo notaron que no tenían un techo donde guarecerse, sino que muchos tenían un delicado estado de salud, heridos, golpeados, vejados en su dignidad.
A este primer ejemplar lo llamaron Zuika, que significa “Conejo bebé”, en lituano. Posteriormente realizaron un viaje de vuelta a su país de origen para buscar y llevar consigo de nuevo a la isla a su otro perro llamado Rudis.
“En este momento, hay 15 perros callejeros adoptados que viven con nosotros: 2 perros ciegos, 4 con discapacidades. Todos ellos tienen sus propias historias, han sido salvados de la muerte, algunos son cachorros, cojos, paralíticos, etc.”, señaló Mantas.
No obstante, mantener a una familia tan grande no es solo acariciar y hacer botellas, risas y felicidad. En muchas ocasiones se presentan situaciones difíciles con las que la pareja debe lidiar.
Para ello crearon la organización Sabai Dog Koh Kood. Así con la organización, Mantas y Rasa no solo ayudan a sus 15 mascotas, sino a todos los peludos que lo necesiten.
Sabai Dog Koh Kood, tiene como único objetivo rescatar y hacer felices a todos los perros de Koh Kood, asesorados por un grupo de veterinarios extranjeros y por la Universidad Khon Kaen. Realmente inspirador.