Durante las jornadas de trabajo, los policías interactúan con muchas personas de todo tipo durante sus servicio y algunos seguro se involucran un poco más con ciertos casos.
Después de todo, debajo del uniforme y la postura rígida y dura de un oficial se esconde un ser humano.
Y si tenemos dudas de esto, sólo vale chequear la historia del oficial Jesse Whitten, de 33 años, quien se convirtió en padre de 5 después de adoptar al bebé de una mujer con adicciones que conoció durante su servicio.
Este oficial del Departamento de Policía de Santa Rosa, California, conoció a una mujer mientras cumplía una guardia en la primavera del 2018. Esta se encontraba embarazada y era adicta sustancias ilícitas. La mujer había participado en una pelea.
En esa oportunidad el Sr. Whitten atendió el caso y mientras la trasladaba en su patrulla escuchó un poco sobre la vida de la detenida, un hecho que le suele suceder con bastante frecuencia. Pero en esa ocasión hubo una especie de conexión con ella, el oficial conocía a sus otros hijos.
«Como mucha gente con la que he hablado, escuché sobre su vida y su historia. Conocía a sus otros dos hijos del campamento en el que trabajé para la crianza temporal. Cuando ella comenzó a hablar sobre ellos, tuve una conexión inmediata con ella sólo por saber quiénes eran sus maravillosos hijos», explicó Whitten.
Después de conocer su historia, este oficial se comprometió en ayudar a la mujer. El Sr. Whitten pensó en llevarla a un refugio para personas sin hogar pero terminó por llevarla a un centro de desintoxicación y rehabilitación, con previa autorización de la dama.
En una ocasión, antes de ser internada, el hombre se encontraba con su esposa Ashley Whitten y conoció a la mujer. En ese momento la embarazada tomó la mano de Ashley y la colocó sobre su estómago.
«Mi esposa notó que la mujer estaba embarazada y ella tomó su mano y la colocó la sobre su vientre para dejarla sentir a quién es ahora nuestra hija», dijo Whitten.
A pesar de las insinuaciones de la mujer, estos esposos no tomaban enserio la propuesta.
Ashley y Jesse tiene tres niños: Reese, de 7 años, Kendall, de 5, y Stella, de sólo 3; así que un cuarto bebé no era algo que estuviese en sus planes. Sin embargo, parece que la adopción estaba en sus destinos.
El 9 de febrero nació la bebé de la mujer. A pesar de que ella había intentado rehabilitarse varias veces, la pequeña, de nombre Harlow, tenía lo que consumía su madre en su organismo.
Este hecho, sumado a que la mujer no tenía un hogar donde vivir, llevó a la intervención de las autoridades del Condado.
Al nacer la criatura, se le preguntó a la madre si deseaba organizar su ubicación de emergencia en un lugar de acogida. Sin embargo, la mujer rechazó la ayuda e insistió en que llamaran al oficial que había conocido meses atrás.
«Ella dijo: ‘Sabía que tenías hijas. Sabía que eras firme, pero justo’. Ella tuvo la visión de su hija jugando en tutús con sus nuevas hermanas. Eso es lo que dijo que quería.”, relató el oficial.
Después de conversarlo, Ashley también aceptó iniciar un proceso de adopción por la criatura.
Ahora, Harlow es oficialmente la hija legal de los Whittens. Fueron ellos quienes terminaron de decidir el nombre de la bebé: Harlow Maisey Whitten, el segundo nombre es en honor a su madre biológica.
«Me enamoré de inmediato. Es tan adorable. Llorará si necesita algo, obviamente como lo hacen los bebés, pero tan pronto como la tocamos, inmediatamente deja de llorar. Sabe que está a salvo», dijo Whitten.
No caben dudas de que este oficial tiene ganado un puesto en el cielo. Más que por su trabajo, al adoptar a esta niña ha demostrado tener un corazón muy generoso con ese gran gesto de humanidad. Harlow ya tiene 7 meses con la adopción de su nueva familia tendrá un destino muy distinto y seguramente mejor.
No te vayas sin compartir este gesto. Que la historia del oficial Whittens sirva de inspiración para que más personas puedan sumarse y hacer actos tan generosos como el suyo.