Kayleigh Greer, de 35 años, compró un mueble en el verano de 2016 junto a su esposo Darren, de 48 años, para usarlo como soporte de un televisor, en ese momento deseaba que fuera de color gris pero no pudo adquirirlo.
En la tienda quedaba solo uno de color azul y como era el único que no excedía el presupuesto de la familia se vieron obligados a comprarlo, aunque no combinaría con el resto de los muebles de su casa.
Finalmente se resignaron a su mueble con tres cajones de color azul claro, aunque siempre expresaban su frustración anhelando que fuera de color gris.
Kayleigh, madre de tres hijos, de Stevenage, Hertfordshire aseguró que había preguntado en la tienda si tenían algún otro color, pero le dijeron que era el único mueble que quedaba, así que adquirió el mueble de 175 euros que desentonaría con la decoración hecha con tonos blanco, gris y plateado.
Aunque notó una cinta protectora en la parte superior de cada cajón prefirió conservarla. Aunque el pasado fin de semana mientras limpiaba decidió retirarla para descubrir algo que la dejó sin palabras.
Cuando comenzó a despegar la cinta se desprendió una película protectora de plástico de color azul que cubría la superficie del mueble dejando al descubierto que realmente era de color plateado.
“Nunca sospeché que el color azul era de la película protectora. Sabía que había una cinta blanca en la parte superior de cada cajón, que pensé que era una protección que eventualmente necesitaría arrancar”, relató.
“Cuando comencé a despegar la cinta noté que la película azul se levantó y me asusté pensando que había arruinado el mueble. Pero solo continué pelando y seguía saliendo, debajo había un color gris muy bonito, se veía increíble”, dijo Kayleigh.
Asegura que es como tener un mueble nuevo que no desentona con su habitación sin haber gastado ni un centavo. Está completamente feliz por el descubrimiento, tanto, que quiso compartirlo en las redes sociales sin imaginar que se haría viral.
Mientras Kayleigh descubría que su mueble siempre había sido de color gris su esposo cuidaba a su hijo Taylor, de 8 años, Greyson, de 17 meses y Feliz de 16 semanas.
“Darren estaba abajo con los niños cuando bajé con el plástico azul arrugado entre mis manos para darle la noticia”, relató ella.
Él se quedó igual de sorprendido, las imágenes y la anécdota de esta familia han causado sensación en las redes, muchos cuestionan cómo pudieron tardar tanto tiempo en darse cuenta de ese detalle y aplican el hecho como metáfora para la vida alegando que a veces tenemos la felicidad muy cerca, pero somos incapaces de apreciarla.
Un pequeño detalle puede hacer una gran diferencia, no te vayas sin compartir el curioso incidente de esta pareja.