En estos tiempos de pandemia en los que la vida de todos ha cobrado el mismo valor de un modo bastante especial, la solidaridad debería de estar a flor de piel y el fortalecimiento de las relaciones familiares debería de ser una prioridad. Sin embargo, algo muy distinto ha ocurrido en Brasil, donde un anciano fue abandonado en plena calle por sus propios parientes.
La historia del Don Itamar, de 57 años, es realmente triste e indignante. Este débil hombre fue dejado en una calle de João Pessoa en Paraíba, Brasil, a su suerte ante los riesgos de infección plena pandemia y expuesto a toda clase de peligros.
Al parecer su misma familia lo abandonó en el lugar pero unos vecinos generosos han demostrado tener el corazón más grande que sus mismos parientes y decidieron actuar.
Don Itamar sufre de un problema en su fémur y pierna, además de tener una hernia de disco que le impide caminar.
Con todo y su difícil situación de salud, Don Itamar fue dejado en la acera sin posibilidad de moverse o ir en busca de un poco de agua o comida. El anciano estaba allí, solo bajo el inclemente sol de la ciudad caribeña.
“No puedo ser indiferente ante alguien así en el vecindario, arrojado, incapaz de caminar, muerto de hambre, al sol y sin hacer nada. ¡Esto es inhumano! ”, Dijo Alexandre.
Su situación conmovió a los residentes de la comunidad Alagoinha, en el barrio de Cruz das Armas, en la cual en anciano fue dejado, y estos decidieron actuar entre todos. Por un tiempo estuvieron alimentándolo pero han decidido brindarle un lugar seguro.
“Somos quienes le preparamos el almuerzo, su cena, quienes lo mantienen alejado del sol, lo ponemos a la sombra, y refugiamos de la lluvia«, dijo el residente Alexandre Silva.
Dada la inminente preocupación que existe sobre el futuro de Don Itamar, algunos vecinos decidieron hacer pública su situación a la espera de que las autoridades puedan actuar de forma inmediata en este caso y el abuelo no deba seguir pasando por estas penurias.
A través de un vídeo que ha circulado por las redes, Alexandre Silva junto a otros vecinos denunciaron la situación de este anciano para hacer más presión a los entes competentes o a alguna organización que pueda hacerse cargo del hombre de forma permanente.
Curiosamente la primera respuesta que obtuvo la denuncia de los vecinos fue de parte de la propia familia del hombre, quienes han solicitado que retiren de inmediato la grabación de las redes sociales en las que fue compartida.
Pese a los reclamos, el vídeo continuó compartiéndose y la comunidad se hizo cargo del anciano por al menos por una semana.