Son muchas las dificultades a las que se enfrentan los niños en los países africanos para poder estudiar. Este es el caso de una pequeña en Nigeria, que a través de las redes sociales solicitó apoyo para mantenerse en su escuela, muchos prometieron ayudarla, pero un posterior vídeo mostró la realidad de lo ocurrido.
Success Adegor es una niña de ocho años que vive en Sapele, una localidad del estado de Delta, en Nigeria; junto a sus padres, Godwin Adegor, que es motociclista comercial y su madre que se dedica a vender tarjetas telefónicas y huevos, juntos a sus dos hermanos mayores que están en la escuela secundaria.
La niña estudia tercer grado en la escuela primaria Okotie Eboh 1, y se dio a conocer el año pasado a través de un vídeo que fue grabado con la ayuda de su vecina Stephanie Idolor, donde denunciaba muy enojada que había sido expulsada por el director de su escuela por no tener con qué pagar.
Después de eso muchas personas de buena voluntad e instituciones prometieron ayudarla económicamente. Success y su familia estaban muy contentos porque podría estudiar con la merecida tranquilidad que tanto deseaba y merecía.
Sin embargo, en un nuevo vídeo donde aparece acompañada de su madre, la estudiante expresó, de forma franca y directa como ya lo ha hecho antes, que la mayoría de las promesas que le hicieron a ella y a su familia no fueron cumplidas y aún tienen muchas dificultades.
“Todo es falso. Vengan a nuestra casa, vienen a prometernos el cielo y la tierra … lo publican en Facebook, todos piensan que somos ricos. Todo es falso”, dijo la enfática Success.
Sus opiniones recibieron respuestas de algunas celebridades como el comediante Seyi Law que aclaró que nunca le hizo ninguna promesa, simplemente la presentó en un evento en el que había sido competidor, tal como lo habían querido los organizadores.
Por su parte, Freedom Okpetoritse Atsepoyi, conocido popularmente como Mr Jollof, describió a la familia como unos ingratos que simplemente buscaban exprimir al público y a las celebridades, después de gastar el dinero que obtuvieron el año pasado.
Pero la jovencita insistía en que su padre ni siquiera ha recibido un buen trabajo como le habían ofrecido.
“No le dieron ningún trabajo a mi papá, mi papá todavía anda en su motocicleta”, agregó la persistente y dedicada niña.