Desde que un hombre compartió en las redes sociales las imágenes de una anciana que se dedica a vender servilletas bordadas por ella ha generado miles de reacciones.
Especialmente una de las fotos ha llamado la atención de los usuarios de las redes, se trata de la emotiva imagen en la que la artesana se muestra afligida junto a sus productos porque no los ha podido vender.
El nombre de la abuelita que protagoniza estas escenas es Adela Vidales, es de la comunidad de Turícuaro en Michoacán, México. A pesar de su edad, se ve en la obligación de dedicarse al comercio informal para poder llevar dinero a su casa.
Se ha dedicado a la venta de servilletas bordadas a mano, las ofrece en Uruapan y San Juan Nuevo Parangaricutiro por un costo de 40 pesos mexicanos, el equivalente a 1,87 euros.
Doña Adelita, como cariñosamente la conocen en su comunidad, estaba muy triste, nadie había comprado sus productos.
Leo Brown, fue quien compartió la publicación en su Facebook el pasado nueve de noviembre, desde entonces ha sido compartida por más de 6 mil personas.
Doña "Adela" estaba triste porque no había vendido sus servilletas artesanales, y le dije que le iba a promover sus…
Publicada por Brown Lee en Sábado, 9 de noviembre de 2019
Incluso muchas han comentado expresando su deseo de ayudar a Doña Adela comprándole las servilletas. Su caso se ha hecho viral, demostrando una vez más el poder de las redes sociales cuando se trata de unir fuerzas por una buena causa.
Cuando Leo vio a Doña Adela ella tenía una expresión de tristeza en su rostro, estaba sentada en unas escaleras desconsolada porque necesitaba vender las servilletas.
Ese era el único medio con el que contaba para tener un ingreso y satisfacer las necesidades básicas de su humilde hogar.
Le tomó una foto, pero después le pidió que posara con las servilletas bordadas porque la ayudaría a promocionar sus productos en las redes sociales.
Así que ella orgullosamente mostró la artesanía que fabricaba.
“Doña Adela artesanales; le dije que iba a promover sus productos en las redes y se alegró mucho. Los invito a comprarlos”, escribió Leo.
Para Doña Adela ese gesto representó la esperanza de vender sus servilletas, Leo escribió la dirección en la que podían encontrarla y muchas personas expresaron su deseo de convertirse en sus clientes.
Incluso Doña Adela tiene un club de fans de quienes la admiran por su talento y también por la perseverancia que muestra al trabajar a su edad con esfuerzo y dedicación.
Algunos proponen que pueda vender sus servilletas a través de Internet para que pueda traspasar fronteras.
Ojalá que la abuelita reciba la ayuda que necesita para tener un ingreso estable y poder vivir con tranquilidad sus últimos años.
“Son hermosos sus bordados, este es el tipo de personas que vale la pena apoyar. Los pequeños detalles llevan a grandes cosas y ella adorna hermosas sus servilletas”, comentó una usuaria de Facebook en la publicación.
No te vayas sin compartir esta emotiva historia que nos recuerda el valor de ayudar a los demás, no podemos ser indiferentes ante las necesidades que vemos alrededor. Un pequeño gesto puede hacer una gran diferencia.