Ser madre es un suceso más que especial, aunque no te hayas enterado de ello hasta el día del parto, como sucedió increíblemente a una joven brasileña de 19 años de edad, cuyos médicos sospechaban que tenía un fibroma, un tumor uterino, ya que no había menstruado durante algunos meses.
Para la joven Nathaly Lopes no había ningún indicio, además de la ausencia de menstruación, que le hiciera sospechar que se encontraba embarazada, su barriga nunca creció y tampoco aumentó su peso.
En febrero pasado, Nathaly fue a ver a un ginecólogo debido a que había dejado de menstruar; después de un examen de tacto, el médico le diagnosticó dolor pélvico crónico y le habló de la posibilidad de tener un fibroma.
“Me pidieron que me hiciera una ecografía. Pero, siempre que lo iba a hacer, la máquina se averiaba, para mi suerte”, asegura la joven.
A lo largo de los meses, Nathaly experimentó muchos calambres. A los pocos meses, la joven acordó ir a consulta médica el 21 de octubre, sin embargo, el día anterior los dolores fueron tan insoportables que debió ser trasladada de emergencia al Hospital São José, donde descubrió que estaba embarazada.
“Cuando llegué al hospital, el bebé no tenía latidos y tuve que ir directamente a la sala de emergencias para dar a luz. El equipo médico informó que tenía aproximadamente 39 semanas de embarazo, según la dilatación”, narró la joven.
Fue así como Nathaly pudo conocer finalmente a su sospechoso tumor, que en realidad resultó ser una hermosa bebé a la que nombró Elise. La pequeña nació con 47 centímetros y pesando 2.850 kilogramos, completamente saludable.
“Los médicos dijeron que si no he tenido mi período desde febrero, mi barriga debería ser enorme. Mi barriga básicamente no creció. No me puse nada, no podía sospechar que fuera un embarazo”, señala la mujer.
Para Nathaly el nacimiento de su bebé es un regalo divino. Perdió a su madre a causa del cáncer el año pasado y Elise es el nombre que había elegido junto a ella para el día que tuviera una hija.
Pero, en medio de la gran felicidad, esta joven se ha tenido que enfrentar a una cruda situación: ser despedida del empleo en que se encontraba a prueba y del que tuvo que salir de emergencia hacia el hospital tan solo dos días después de haber comenzado.
Por eso, ahora esta joven pide ayuda de los internautas que han conocido su caso, para poder cubrir las necesidades de su pequeña y también de su familia, especialmente de su abuelo de 67 años de edad que no cuenta con jubilación y depende exclusivamente de ella. Se puede donar a la causa haciendo clic aquí
Confiamos en que esta joven pueda recibir la ayuda que tanto necesita y que muy pronto pueda encontrar un nuevo empleo. Por lo pronto, ¡los mejores augurios para esta orgullosa madre y su hermosa bebé!
No te vayas sin compartir esta insólita historia con todos tus amigos y nunca descuides tu salud, podrías llevarte una gran sorpresa.