Son muchos los padres que en su afán de velar por que no les falte nada a sus hijos y con la excusa de no querer «privarles de aquello que ellos no tuvieron en su infancia», los mal educan y las consecuencias pueden ser nefastas.
Es el precio que tuvo que pagar Haley Hassell, una madre soltera de Florida (Estados Unidos), al darse cuenta del comportamiento de su pequeña Presleigh, de 6 años, tras comprarle un estuche nuevo para la entrada al cole.
Al parecer la madre hizo grandes esfuerzos por conseguirle el famoso estuche que Presleigh tanto quería, visitó 3 tiendas hasta encontrarlo, y cuando por fin pensó que su pequeña estaría feliz con el regalo, lo que tuvo por respuesta la llenó de indignación y frustración.
Presleigh no supo valorar el esfuerzo de Haley y tuvo la peor actitud. El estuche le pareció horrible porque «todos sus demás compañeros ya lo tenían» y ella quería algo diferente. Seguramente te parecerá familiar la escena: la pequeña dominada por el capricho y totalmente molesta, arrojó el estuche nuevo a la basura y se fue enfadada a su habitación, no sin antes dar un fuerte portazo para hacerle ver a su madre su enojo.
“Eso es estúpido, todos en mi clase la tienen. Ya no la quiero», había reclamado la pequeña antes de arrojarla al basurero.
Aunque evidentemente a Haley, según relata, «le salía humo por las orejas», esta vez decidió que debía ser más inteligente que su hija y actuar proporcionadamente a su comportamiento pero de manera contundente, sin gritos, ni insultos, ni violencia.
Así que decidió darle la lección de su vida a la pequeña y compartió la anécdota en sus redes sociales, donde acumula más de 130.000 me gusta y ha sido compartida casi 60.000 veces.
«Me di cuenta que, a pesar de que siempre le había enseñado a ser agradecida, necesitaba un pequeño llamado de atención. Así que antes de volverme loca con mi hija, me tomé un segundo y le dije: ‘Ok, déjame que voy a buscar el estuche que vas a usar’. Cuando volví con una bolsa de plástico con cierre hermético, de esas que se utilizan para guardar alimentos en la nevera, ella enloqueció», escribió la madre.
«De repente,el estuche que ella había tirado a la basura era perfecto y la bolsa de plástico era horrible.
Pero ya era tarde. Le ordené que recogiera el estuche de la basura y que buscara a un niño para regalárselo. Un pequeño cuyos padres no tuvieran recursos para comprarle útiles escolares o alguno que ni siquiera tuviera padres», agregó en su relato.
Haley hizo eso para enseñarle que no debía ser caprichosa y que no era consciente de la suerte que tenía.
Su nuevo estuche sería la bolsa hermética perfectamente identificada que ponía: «bolsa de lápices de Presleigh»
Por un minuto Presleigh se arrepintió de por vida de lo que hizo y daría lo que fuera por recuperar el regalo que rechazó.
La madre reconoció que a lo mejor fue muy dura, «pero lo cierto es que yo hubiera dado cualquier cosa con tal de tener todo lo que ella tiene ahora».
«Yo creo realmente que cambiar tus percepciones y simplemente ser agradecido puede cambiar cualquier situación en la vida», concluye su publicación que ha sido aplaudida por muchos.
Aunque ciertamente algunos alegan que no debía exponer así a su hija en las redes, ese tipo de lecciones se hacen en privado, defienden.
Déjanos saber qué opinas de la polémica lección de esta mujer que sin duda ha dado mucho de qué hablar en las redes. ¿Cómo habrías actuado tú en su lugar? ¡Compártelo!