Luna Fenner es nuestra hermosa protagonista, una niña que a pesar de ser visiblemente diferente al resto ha cautivado miles de corazones con su ingenua sonrisa.
La pequeña de tan solo siete meses de nacida viajará a Rusia con la esperanza de recibir un tratamiento que reduzca la gran mancha que cubre su rostro.
Cuando nació Luna tanto el médico que la atendió como su madre quedaron muy sorprendidos al verla.
La niña nació con un nevo melanocítico congénito, según la Biblioteca Nacional de Estados Unidos, es una afección de la piel que aparece como un parche oscuro que cubre gran parte de la cara y no es canceroso.
Uno de cada 20.000 recién nacidos nacen con un nevo, sin embargo, el de la pequeña Luna tiene un tamaño bastante grande lo que llama aún más la atención de los expertos.
Durante el embarazo de Fenner no se detectó ningún signo de la afección.
Su madre, Carolina Fenner y la pequeña Luna viajaron a Rusia para reunirse con el Dr. Pavel Borisovich Popov quien realizará un procedimiento quirúrgico no invasivo. La madre de la pequeña señala que decidió a realizar el procedimiento debido a la intimidación que recibía su hija de algunas personas.
Desafortunadamente, mucha gente no está educada o preparada para ver una condición tan marcada como la de la pequeña Luna.
Algunas personas le llegaron a preguntar si se trataba de alguna enfermedad contagiosa.
Fenner comenta que a pesar que su hija se someta a la cirugía, le quedaran algunas marcas, pero ella tendrá todo el tiempo y la dedicación para enseñarle a tratar a las personas que la miran mal por lucir diferente.
La afección de Luna se confirmó solo seis días después de su nacimiento, en ese momento le informaron que no había efectos secundarios, pero de no someterse quirúrgicamente con el tiempo le causará gran dolor.
Los nevos gigantes están relacionados con una mutación de los genes.
El nevo de Luna era tan grande que cubría casi todo su rostro, está afección hace que salga mucho vello en la zona afectada así que su madre lo cortaba cada cinco o seis días. El Dr. Popov se enteró de la historia de la adorable Luna y rápidamente se puso en contacto con la familia, en principio les dijo que recibiría de seis a ocho procedimientos en un año.
El Dr. Popov usará la tecnología y nuevos procedimientos para combatir el nevo.
Los padres de la niña han creado una página de GoFundMe para recaudar fondos que cubran el largo procedimiento de Luna. Fenner están enseñando a su pequeña hija a aceptar y abrazar su diferencia, espera que el resto de las personas comprendan que lo normal es que todos seamos diferentes.
Respetar y aceptar nuestras diferencias es el primer gran paso para tener un mundo mejor. Comparte la nota y hagamos posible ese mundo que todos soñamos.